Mayoría de clubes no tradicionales apuestan por jugadores maduros para no descender

Por ese motivo más del 75% de los futbolistas de equipos como Carmelita, Belén y AS Puma fueron formados en otros sitios.

Los verdolagas, por ejemplo, solo incluyen seis canteranos en su planilla para el Verano 2015, es decir, un 19% del equipo total.

Cruz Campos, presidente carmelo, comentó que la necesidad de mantenerse en la máxima categoría y la poca duración de los torneos cortos los obliga a fichar jugadores cada seis meses.

“Este equipo solo tiene dos años en Primera y el trabajo en liga menor es largo. Mientras los jóvenes no estén listos para debutar, hay que fichar futbolistas que no son de la casa. Solo con muchachos no se puede jugar un torneo”, comentó el jerarca.

Eso sí, Campos agregó que esperan que en dos años el 50% de la nómina sea fabricada en casa.

“Creo que en los próximos años vamos a sacar muchos jugadores. En un torneo tan corto y con tanta competencia no hay mucho margen para darle espacio a los canteranos o jugadores del alto rendimiento”, expresó.

Posición. Mismo criterio comparte el presidente de Pérez Zeledón, Juan Luis Artavia, quien añadió que la falta de recursos económicos limita a los cuadros “pequeños” para nutrir su cantera.

“Falta más elemento humano. Hay limitantes como el dinero. Hemos tratado de llegar a los lugares más lejanos de la zona sur y traernos a las mejores promesas, pero para eso se necesita inversión. Con recursos como los tienen Saprissa y Alajuelense es muy fácil”, enfatizó Artavia.

Otro factor que citó el dirigente generaleño es la obligación del equipo de tener un grupo competitivo en Primera, para que pueda pretender un título nacional.

“No podemos tener un equipo solo de jóvenes; hay un riesgo de descenso y no podemos darnos ese lujo. Se requiere también jugadores de experiencia que puedan darle equilibrio al camerino”, puntualizó el sureño.

Por su parte, el jerarca de la Universidad de Costa Rica, Luis Gamboa, explicó que para tener un número alto de futbolistas de la casa se precisa mucha coordinación entre el técnico de la Primera y los de la liga menor.

“Debe haber una relación estrecha entre los diversos entrenadores. En Primera muchos apuestan por sus hombres, por gente de trayectoria. Hay un deseo de competir por el cetro, no por el descenso”, puntualizó.