Dentro del espectro del futbol tico, el cual estará detenido hasta la última semana de julio debido al Mundial, hay varios equipos que logran superar ese período de inactividad, estadios vacíos y entradas nulas, gracias a una buena planificación de su presupuesto.
Saprissa y Alajuelense, dos empresas bien establecidas y con una exposición mayor, no tienen problema alguno.
Incluso, el presidente rojinegro, Jorge Hidalgo, dijo que en la parte financiera caminan con tranquilidad más allá de la inactividad y más bien le preocupa el aspecto deportivo (falta de ritmo).
Los manudos siguen alimentándose de patrocinios, venta de productos y buscan partidos amistosos internacionales.
Por su parte, el jerarca de Pérez Zeledón, Gilbert Fernández, dijo que en su equipo nunca se perdió la tranquilidad, y aunque reconoce que la “sequía futbolística” complica, los generaleños tienen un proyecto estable desde hace años, que se basa en el buen manejo de un presupuesto anual.
San Carlos es otro de los que gozan buenos instantes, sin embargo, no siempre fue así.
Los norteños recogen lo sembrado en el torneo anterior, donde llegaron a la final y consecutivamente fueron llenando asientos.
De acuerdo con el presidente de los Toros, Ronald Solís, el club siempre se financió merced a los patrocinios, pero que pocas veces alcanzaba. Empero, “a raíz de que el equipo estuvo peleando el título, quedamos en una condición mucho más favorable”.
Cartaginés, según su presidente, José Luis Rodríguez, anda bien por la política de no inflar salarios, lo cual permite afrontar las obligaciones contractuales.
Brujas y Santos tampoco sufren demasiado por el parón.