Remontar una final no es fácil.
La historia del futbol costarricense lo denota así, al tener prácticamente vacío ese apartado.
Pero en esa hoja hay una larga línea dedicada al Invierno 2008 .
En ese certamen, Alajuelense llegó con una extensa racha negativa de no poder derrotar a su archirrival, Saprissa .
También tenía unos cuantos años de verlo alzar trofeos y colgarse medallas en el cuello, por lo que los futbolistas rojinegros salieron al partido de ida con todos esos ingredientes presentes en la retina.
Ganaron 2-0 en el estadio Alejandro Morera Soto con goles de Pablo Herrera y Cristian Oviedo, y alistaron una gran fiesta.
Pero todos los utensilios de celebración los tuvieron que guardar de nuevo dentro del clóset.
El Monstruo humilló a los manudos con un inapelable 3-0, tras los goles de Alejandro Alpízar, Armando Alonso (curiosamente ambos están hoy en las filas del conjunto alajuelense) y Jairo Arrieta.
Ese debe ser el antecedente al que Santos de Guápiles apele en esta nueva final.
No solo porque los morados fueron capaces de quitarse dos pesadas anotaciones de sus espaldas, sino porque realmente es el único escenario similar al que necesitan el próximo sábado en el estadio Ebal Rodríguez de Guápiles.
La otra vez en que un equipo perdió el primer duelo de la final fue en la temporada de 1947, pero este tiene un detalle especial.
Para aquellos años, todavía el concepto del marcador global no se utilizaba en el futbol tico.
La Libertad triunfó 2-1 frente a Herediano; sin embargo, los florenses se vengaron con un 7-0.
La norma exigía un partido de desempate, en el cual también triunfó el Team, por 2-0.
Todos los partidos se jugaron en el viejo Estadio Nacional. Los Datos estadísticos fueron tomados del libro Huellas del Futbol tico