Alajuela
Algunos nunca lo habían tratado más allá de enfrentarlo como rival y quizás hasta tenían otra percepción de él, pero ya cayeron en cuenta de que la primera impresión no siempre es la correcta.
Brayan López, Din John Arias, Jake Beckford, Álvaro Aguilar y Seemore Johnson no se imaginaban que al entrar al camerino rojinegro, Jonathan McDonald sería de los primeros jugadores en darles la bienvenida y romper el hielo.
"Cuando he compartido otros camerinos, tienden como a aislarlo porque es el nuevo o porque es el extranjero y se siente muy feo, entonces obviamente uno no tiene que hacer lo mismo que te hicieron otros y más bien hay que sentir esa vivencia y transmitirles a ellos que están en un camerino bueno, sano", comentó el delantero liguista.
Aunque cosas como esas casi nunca salen a la luz, él considera que es importante, porque ayuda a que los recién llegados dejen de sentirse como los nuevos y que de una vez se acoplen, se sientan parte del grupo y que la adaptación sea rápida y buena.
"Se estuvo hablando de división, de separación, que había un grupo y otro grupo y la verdad es que mientras yo he estado aquí en la Liga, nunca se ha dado, siempre tratamos de que la inclusión de los muchachos nuevos sea lo mejor posible y hacerles ver lo que es estar en la Liga", relató Mac.
Para él, cada futbolista tiene que aprovechar su oportunidad y demostrar en la cancha lo que es, porque al final de cuentas es ahí donde se ve quién es quién.
"Uno trata de hacerles ver que aquí es presión todos los días, es presión en todos los juegos, mayor exposición mediática, mayor exposición en las afueras del estadio porque no es solo venir a entrenar. Siempre tenés que dar el ejemplo en las horas que no estás acá y en el cuido personal, todas esas cosas son fundamentales y trato de ayudarlos a ellos a que se sientan cómodos, que se sientan como en una familia, que llegaron a un camerino sano, competitivo, que quiere ganar y trascender", apuntó.
En Alajuelense continúan entrenando y desde este miércoles empezaron a practicar en la cancha híbrida del Centro de Alto Rendimiento en Turrúcares.
Las prácticas de los erizos se mantendrán hasta mediados de mayo y luego se les darán unas tres semanas de vacaciones.
Mac tenía una oferta jugosa, pero de nuevo eligió quedarse en la Liga
A Jonathan McDonald le resta año y medio de contrato con Alajuelense, pero al igual que ocurre con todos los futbolistas, en el momento en el que llegue una opción de marcharse al extranjero, la analiza.
Cuando los rojinegros culminaron su participación en la ronda regular del Verano, Mac tuvo una propuesta para jugar afuera, pero de nuevo, él decidió quedarse en la Liga.
"Había una opción sobre la mesa, entonces salieron algunos rumores de que yo me iba a ir, que no iba a continuar, que iba a buscar una opción afuera, pero era por esa razón, no era que estaban pensando en quitarme del grupo o una cosa similar, era porque había una oferta formal en el escritorio de la Liga, así que decidimos no tomarla y seguir con este proyecto que viene bien, que viene bonito", afirmó.
Dijo que no le cierra las puertas a nada internacional, pero tiene que ser algo que le guste. "Económicamente era mejor opción que acá en la Liga, pero futbolísticamente no me llamaba tantísimo la atención y la verdad que me encanta el proyecto este de la Liga con cancha nueva, con jóvenes. La opción debe ser en Europa o la MLS, la que entró fue acá de Centroamérica y no me sedujo por completo esa parte", subrayó.
Pero él se siente cómodo donde está y cree que tiene mucho que aprender con Benito Floro y retribuirle a la Liga un poco de lo que le ha dado.
"Repito, me llena de mucha ilusión este proyecto y si lo dejo es por algo que me seduzca muchísimo en la parte futbolística, no solo en lo económico. La motivación que uno siente al estar rodeado de jóvenes y poderles ayudar y enseñar, me llena a mí de muchísima ilusión".
Al parecer, esa opción que tuvo era con el Comunicaciones de Guatemala, dirigido por Rónald González.
'Ya captamos un 90% la idea del profesor'
Jonathan McDonald está convencido de que Alajuelense comenzará a ver la luz a partir del próximo torneo.
"Yo creo que ya nos empezamos a entender, ya captamos un 90% la idea del profesor (Benito Floro), hay cosas que obviamente hay que afinar, pero yo creo que en los últimos partidos se notó que empezamos a agarrar lo que el profesor quiere, aunque fuera tarde, pero se dio", indicó el delantero.
Él piensa que hacer tantos cambios en tan poco tiempo es un poco complicado, máxime que se trataba de una filosofía y una ideología muy diferente a la que están acostumbrados los jugadores de Costa Rica.
"Todos aprendimos, tanto los que están empezando como los de mayor experiencia, todos aprendimos del profesor. Eso fue lo que nos costó un poco al principio, entenderle, tal vez un poco por el dialecto y por algunas cosas que uno quizás no entendía y creía que eran así, pero nos equivocamos. Cuando el grupo empezó a madurar y a unirse comenzaron a llegar los partidos buenos de nosotros", relató.
Después de esa frustración, rabia e impotencia que experimentaban los jugadores manudos al ver que los resultados no llegaban y cuando las posibilidades de clasificar a la cuadrangular eran mínimas, el grupo reaccionó y ganó sus últimos cuatro juegos contra Saprissa, Carmelita, San Carlos y la UCR.
"A veces el marco no se nos abría y al final empezamos a anotar, a ser contundentes y hacer las dos cosas de la mano, ganar y jugar bien con la pelota".
En lo personal, este torneo fue muy complicado para él, porque en el inicio tenía que purgar una suspensión de cuatro juegos y en ese lapso se lesionó. Corrió más, se le veía muchas veces de volante y hacía varios movimientos que se le encomendaban, pero los goles no aparecían y eso le generaba mayor presión.
"Vinieron los goles, tarde, pero al fin llegaron y nos llena de motivación, de ilusión, porque lo que viene, viene bonito y a todos nos llena muchísimo de ilusión y prácticamente todos queremos que el torneo empiece ya", finalizó McDonald.