Redacción
Esta vez no tiró la boina. Hernán Medford se mostró más tranquilo de lo habitual. Su equipo lo hizo verse así, ganando sin complicaciones y convenciendo con su propuesta de siempre, hacia adelante.
La mano del Pelícano apenas si se notó en algunas variantes inesperadas, cómo la ubicación de José Miguel Cubero en el centro de la zaga, dándole oportunidad para subir hasta su posición natural en el mediocampo en algunas ocasiones cuando el equipo necesitó un apoyo extra en la salida. El sacrificado fue Luis Omar Hernández.
También colocó a Allan Miranda como lateral derecho y a Esteban Ramírez de titular en la zona medular.
Medford salió satisfecho con el resultado, pero reconoció que aún hace falta tiempo para que se vea su mano en el accionar del plantel.
"Contento con el triunfo, pero se ha tenido poco tiempo y no se pueden hacer milagros. Estoy contento (con la calidad en ofensiva) pero igual me parece que nos paramos bien atrás", dijo Medford.
El nuevo estratega florense destacó la versatilidad de su plantel. El posicionamiento de Cubero es un buen ejemplo.
"Hay jugadores que pueden jugar en distintas posiciones y eso es importante. Yo creo que así no solo es Víctor Núñez, sino todo el equipo. Yo nunca hablo individualmente de ningún jugador", explicó el timonel florense.
En 90 minutos, el entrenador apenas reclamó en una oportunidad, cuando el árbitró pitó demasiado tarde un fuera de juego en contra de su equipo. Recibió un pequeño llamado de atención y listo.
El debut mostró la versión más temprana del estratega, pero el camino apenas está iniciando.
"El equipo jugó bien, ante un buen plantel como Santos. Creo que controlamos el juego", concluyó.