Tras 13 años de estar al frente del Pérez Zeledón, el empresario y dirigente Gilberth Fernández decidió poner un alto en su vida y a partir del 15 de enero no será más el encargado de velar por el equipo.
¿Cuál es la principal razón por la cual dejará de ser el presidente del Pérez Zeledón?
Son 13 años de estar al frente, hay temas que desgastan, se necesita gente que llegue a trabajar en lo que falta, me parece que Pérez es un sistema de vida dentro de mi formación, es una decisión que me ha costado mucho tomar pero ya es el momento.
¿Qué lo convenció a no presentar su papeleta para la asamblea del 15 de enero?
Todo el entorno político de Pérez Zeledón. Se necesita más colaboración, yo dije que nunca iba a hacer conciencia en nuestros concejales y hasta el momento no lo he hecho ni lo voy a hacer.
¿Se siente cansado ya de llevar las riendas del equipo?
Es un momento idóneo para un descanso mental, no físico. Ahora quiero darle más tiempo a mi familia, a la parte personal, dedicarme más a las empresas, muchas veces descuidé mis negocios y a veces el tiempo no alcanza. Recordemos que el promedio de vida en Costa Rica es de 80 años y yo ya tengo 51, tampoco es que me queda un montón.
¿Cuánto influyó en su decisión los problemas con la Municipalidad de Pérez Zeledón?
Mucho. La parte política hace mucho daño en el fútbol, nos causó mucho problema. Hay gente que entorpece los trabajos y no tiene la noción del sacrificio que hacemos para tener al equipo que hoy tenemos. En su momento se destinaron unos ¢650 millones para el club. No tenemos una partida municipal, a Pérez nunca le pagaron ni el recibo eléctrico.
¿Cuáles son sus principales logros al frente del Pérez?
Bueno, el mayor logro es la estabilidad que se le dio al equipo desde 2001 y llegar a ser un cuadro competitivo, un plantel respetado que eliminó a grandes en determinados momentos, que fue campeón de Apertura 2005, que le dio vuelta a resultados , todo eso motivó al pueblo.
¿Cómo deja económicamente al equipo?
Quedamos bien, hemos asegurado que los patrocinios queden firmados por lo que resta del otro torneo. Para tener un equipo limpio de deudas hay que hacer mucho sacrificio como dirigente, reiteradas veces tuve que venir a San José a buscar un patrocinio con mi plata y uno tiene que invitar mínimo a una cena y eso toda la vida salió de mi bolsillo. Sacamos dinero propio porque no nos alcanzaba con el presupuesto. Es una forma de ser, yo lo hice así.
¿Es rentable presidir un equipo como el Pérez Zeledón?
No es rentable. Falta mucho apoyo por parte de empresas y de la misma afición. En determinado momento tuve que sacar plata para pagar la planilla y hoy es mínimo lo que se me adeuda.
¿Cree que la afición del Pérez Zeledón no es fiel?
No. Falta más apoyo del pueblo. La afición de Pérez no es fiel como la de Cartaginés, que apoyan incondicionalmente. La de Pérez apoya cuando estamos en problema de descenso o disputando una semifinal.
¿Por qué cambió tanto de técnico? 14 en cuatro años...
En el fútbol hay que tomar decisiones todos los días y si uno no las toma puede terminar en Segunda División. Hay equipos con tres técnicos en un torneo y nadie dice nada. Gracias a Dios estamos en Primera por las decisiones que tomamos en momentos de angustia y congoja.
¿En algunos momentos tomó decisiones con el hígado?
Hace 13 años era otro dirigente, hoy tengo una experiencia y un bagaje muy amplio de lo que es ser dirigente deportivo, muy distinto a ser un aficionado. La vida lo va moldeando a uno. Si comparamos el Gilberth de antes y el de ahora, hay mucho cambio.
¿Es un dirigente polémico?
Desgraciadamente tuve que ver en situaciones en las que no estaba involucrado. Le pongo un ejemplo: cuando el equipo se intoxicó previo a un partido ante la Liga yo estaba durmiendo en mi casa y al otro día salió Raúl Pinto diciendo que iba a pedir un voto de censura contra mí. ¡Qué culpa tenía yo de eso, muchacho!
Usted se caracterizó por decir las cosas siempre de frente...
En este país mucho dirigente es hipócrita y yo la hipocresía no la he conocido, soy muy sincero y eso a mucha gente le cae mal. Yo siempre dije las cosas de frente. Mi vida ha sido muy transparente. Soy muy honesto.
¿Le molestó que equipos grandes se llevaran a extranjeros que traía el Pérez?
Sí, claro. Hay políticas de equipos y dirigentes muy sucias y muy deshonestas, que negocian con jugadores en plena semifinal, los equipos grandes están acostumbrados a hacer ese tipo de cosas, es una deslealtad.