Luego de un Invierno oscuro el Verano por fin le devolvió a Limón la sonrisa caribeña, esa alegría que perdió en el pasado semestre pero que ahora regresó y hoy tiene a los dirigidos por Carlos de Toro cerca de la zona de clasificación.
Con 11 puntos en la tabla, la Tromba del Caribe parece levantar vuelo luego de muchos traspiés y prueba de ello son sus tres victorias al hilo, una marca esquiva y que hoy exhiben con orgullo.
Desde su regreso a la Primera División en 2010, los limonenses solo lograron ese registro en tres oportunidades.
La primera –y mejor hasta la fecha– llegó en el Invierno 2012, cuando Cartaginés, Alajuelense, Belén y San Carlos cayeron ante la inspiración de un equipo que sorprendió por su forma y juego.
Un año después, para el Invierno 2013, la racha regresó con las celebraciones ante Carmelita, Belén y Uruguay, a la postre interrumpidas por la mano dura de Herediano, que los venció 1-2 en el Juan Gobán.
Finalmente, la actual con una seguidilla que se inició con victoria por la mínima ante Pérez Zeledón, continuó con un marcador idéntico ante la UCR y sigue con la victoria del martes ante Carmelita, en un juego que empezó cómodo para los caribeños pero luego se les complicó con el paso de los minutos.
Lo que sigue. En su objetivo de seguir alimentando esa racha los limonenses tendrán el domingo una visita con cartel de incógnita, pues recibirán en su casa al apurado Belén, dueño del incómodo sótano.
Será un duelo de relevancia para ambos por sus razones particulares, un pulso de marcador reservado que se jugará a las 6 p. m.
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