Herediano quiere ser el líder por tercera ocasión consecutiva, es casi una obsesión mostrarse como el mejor equipo. Para Saprissa lo que importa es no volver a sufrir por una dichosa ventaja deportiva en semifinales. Y más lejos anda Alajuelense, que tiene la mente en las nubes (llamémoslo Concacaf).
Para el Team el liderato es tan común que ya se convirtió en obsesión. Los florenses no pueden ni deben, por la calidad del plantel con el que cuentan, conformarse con nada menos que la cima del torneo.
No será fácil, ya Carmelita le metió un pinchonazo grave y el calendario no es su amigo: en esta segunda vuelta les tocará visitar al Saprissa y a Alajuelense, sus más inmediatos perseguidores.
Saprissa será el principal cazador de los heredianos. Eso sí, Rónald González lo ha dejado claro: su meta es la ventaja deportiva, ya sea que llegue con el liderato o con el segundo lugar. Todo es no volver a quedarse fuera en “semis”, menos por la ventaja deportiva.
Las aspiraciones moradas crecen con algo que jugadores y cuerpo técnico han declarado: “A la Liga y al Herediano los esperamos en Tibás”. El monstruo definirá en la Cueva, para bien o para mal, el destino de la punta del campeonato.
Mientras que Alajuelense, por nómina y corona, no se puede descartar. Con la salvedad de que tiene la mente puesta en la Concacaf y no volverá a ver al torneo terrenal hasta que queden eliminados o consigan su sueño.
Óscar Ramírez es el primero –y quizá el único– en descartar a la Liga de la batalla por el liderato.
Si usted le pregunta a Machillo por su equipo, el Verano o el liderato, él siempre le responderá hablando de la responsabilidad de la Concachampions .