Si ha habido una vitrina ideal para que Deyver Vega muestre el talento de su zurda, es la de los clásicos, partidos que se han vuelto un terreno místico, en los que el “15” de la S desparrama defensas, acribilla porteros y se hace figura.
Los manudos lo recordarán por aquel trallazo que le dio el triunfo a Saprissa en el Verano 2013 y que dejó a la Liga casi sin opciones de llegar a unas semifinales que, a final de cuentas, no disputó.
También del gol que ilusionó con la posible clasificación a la S de Rónald González, en la ida de las “semis” del Invierno 2013.
Más reciente –y más dolorosamente también– fue el gol que marcó en el Morera Soto, su único en ese reducto, para asegurar la clasificación morada a la final para el título del Invierno.
“Es algo que quiero cambiar. Estoy tratando de ser constante en todos los partidos, no solo en los clásicos, pero es que son partidos muy diferentes”, aseveró el sancarleño.