Alajuela. Uno se sigue cerrando la puerta a pelear por los puestos de arriba; otro no termina de decidir si sale o no de la parte baja.
Carmelos y uruguayos dividieron anoche un empate a uno en la cancha del estadio Alejandro Morera Soto, el cual complicó a ambos en sus respectivas aspiraciones dentro del Invierno 2013.
Sin embargo, dentro de los dos oscuros panoramas, la igualdad debería dejarle las mayores nubes a los verdolagas, que cada vez ven más disminida la ilusión de avanzar a una siguiente fase.
Es por su propia culpa, ya que si no es por medio de penales errados, encuentran otra forma de desaprovechar los partidos en los que en teoría deberían sumar (eso si quieren pensar en algo más que subsistir en la Primera). Hasta parece que se esfuerza por hacerlo.
La Barriada no juega mal. De hecho, en muchos de sus partidos domina, tal y como lo hizo recientemente ante la Universidad de Costa Rica y ante Belén (los dos también fueron empates y de local). Simplemente cada vez que puede colarse en la zona de clasificación a semifinales, peca gravemente.
Ayer en el primer tiempo ante los lecheros, los verdolagas mandaron al traste dos opciones clarísimas de sacudir la red, de esas clarísimas en las que es más fácil meterla que botarla, de esas en que suena al unísono en el estadio un incrédulo “¡noooooo!”
Ignacio Quesada fue el del primer turno al tirarla por un costado. El guardameta Ricardo González estaba hasta descolocado por un desvío en uno de sus defensas (13').
Carlos Clark fue el del segundo al mandarla por encima del arco. Quiso meter al arco con todo y balón al propio González, quien ya se había ido a la esquina (34').
Refranes. Definitivamente, se les olvidó que existen un par de dichos referentes a esto. Seguro creyeron que al tener a Uruguay controlado, pues apenas lo que había tenido la visita eran un par de tiros desvidos de Marvin Angulo, los populares “el que perdona, pierde” y “el que no los hace, los ve hacer” iban a ser problema de otro. Error.
Ante un equipo que no sentencia, no queda otra que castigar.
Eso hizo Uruguay. Salió a coger lo que Carmelita dejó en la mesa.
Presionó más arriba, se animó y golpeó con el penal que marcó Johan Condega, al 69’, no sin antes haber estrellado una en el tubo.
No obstante, ¿qué pasó? Se echó atras. Se sintió tranquilo. Un equipo en zona de descenso no puede darse esos lujos, más allá de que fuera para “tomar precauciones”.
El delantero Mario Camacho, quien volvió a las canchas tras una larga lesión, se los dejó muy claro con su tanto salvador al minuto 89 para sentenciar un empate del que nadie puede sentirse feliz.
Carmelita 1
Titulares: Ronny Fernández 6, Carlos Castro 6, Eduardo Gómez 6, Fabricio Chavarría 6, Ignacio Quesada 5, Giovanni Cantillano 5, José Macotelo 5, Víctor Chavarría 6, Carlos Clark 6, Bryan Solórzano 6, Rooney Mora 6. D. T.: Guilherme FarinhaCambios: José Adrián Marrero 6 (Macotelo, 65’), Mario Camacho 7 (Cantillano, 70’), Berny Solórzano (Castro, 76’).
Uruguay 1
Titulares: Ricardo González 7, Seemore Johnson 6, Rudy Dawson 6, Keyner Brown 6, José Luis López 6, Paulo Rodríguez 6, Marvin Angulo 6, Andrés Montalbán 6, Johan Condega 7, Keylor Villegas 6, Carlos Ochoa 5. D. T.: Carlos WatsonCambios: José Martín Leitón 6 (Ochoa, 67’), José Sosa 6 (Brown, 73’), José Mora (Villegas, 86’).
Goles: 0-1 (69’): Johan Condega. 1-1 (89’): Mario Camacho.
Árbitro: Rafael Vega 6, Warner Castro y Edwin Medaglia.
Estadio: Alejandro Morera Soto, 8 p. m.