Alajuela
Minutos antes de las 9 p. m., el equipo de Carmelita llegó a Alajuela, tras vencer 0-1 al Santos en Guápiles con anotación de Carlos Hernández y salvarse del descenso.
Los verdolagas están de fiesta, pero para ellos, lo primero es cumplir con sus promesas, tras el milagro.
Y por eso se fueron directo a la Iglesia El Carmen de Alajuela, donde le dieron gracias a Dios por la permanencia del equipo de Carlos Cañón González en la Primera División.
Bryan Orue hizo una promesa muy peculiar: pese a que es muy cafetero, aseguró que durante 40 días se abstendría de ingerir esa bebida y con una gran sonrisa afirma que le funcionó.
Por su parte, el lateral izquierdo David Calvo dijo que si la hazaña no se hubiera logrado, "habría sido un momento muy difícil, porque más de uno se iba a quedar sin equipo, a la mayoría se nos vencía contrato y esta oportunidad era muy importante para tener un último chance".
"Ahora a disfrutarlo al máximo, darle gracias a Dios y disfrutarlo con la familia, que siempre han estado con nosotros en estos momentos tan difíciles y a la afición dedicarle esta permanencia en Primera", exteriorizó Calvo.
Y agregó: "Esto es mejor que ganar un campeonato, se disfruta a lo máximo esta permanencia porque después de tantas fechas en el último lugar y llegar al último partido a dar lo mejor de cada uno. Nunca nos dimos por vencidos".
A los jugadores y cuerpo técnico de Carmelita los acompañan aficionados, familiares y directivos, quienes celebran a más no poder con una cimarrona.