Alajuela. Este Carmelita es especialista en complicarle la vida a la Liga Deportiva Alajuelense.
El año pasado dejó a los manudos fuera del Torneo de Copa y ayer estuvo a solo tres minutos de volverle a hacer la trastada.
Los rojinegros tuvieron que sudar en serio para conseguir el pase a semifinales ante un cuadro verdolaga que lo tuvo –otra vez– contra las cuerdas.
Un gol agónico y envuelto en polémica de Jerry Palacios a tres minutos del final, le dio a la Liga el primer lugar del grupo B y el derecho a luchar por el pase a la final, aunque tendrá que cerrar fuera de casa la serie ante Cartaginés.
La Liga fue el claro dueño del juego, con mayor dominio de pelota, pero pésimo para darle la puntada final a sus ofensivas.
Carmelita aplicó su receta. La velocidad de Rooney Mora, el toque de Víctor Chavarría y el desborde de José Adrián Marrero.
Fue suficiente para abrir el marcador, gracias a un pasabola en el área manuda al 16’, que Marrero definió con clase, quebrándole la cintura a Elías Palma y sacando un zurdazo rastrero e imposible para Patrick Pemberton.
El 1-0 azuzó a los manudos en ofensiva, pero los desesperó en defensiva. Bien podrían haber acabado la primera parte con un jugador menos, tras las faltas desmedidas de Juan Gabriel Guzmán contra el escurridizo Mora.
La desesperación manuda se hizo más grande al no encontrar un espacio en el cerrojo carmelo y se volvió incontrolable con el segundo gol verdolaga, obra de Rooney Mora al 41’.
Un gran pase de Bryan Solórzano se filtró a la espalda de Palma, y Mora, astuto como es, aprovechó para tocar por encima del arquero desde la entrada del área.
Dos goles abajo y afuera de la semifinal, la Liga no tuvo más camino que buscar la remontada en el complemento.
Allen Guevara fue la apuesta del técnico Óscar Ramírez y trajo sus frutos. El pequeño manudo se arrecostó a la banda izquierda y desde ahí creó serio peligro para los zagueros carmelos.
La tuvieron los rojinegros al 58’, pero entre el arquero Ronny Fernández y Pedro Leal le negaron el tanto a Johan Venegas.
Carmelita fue más cauteloso. Cerró líneas e intentó dar la sorpresa con los contragolpes. Así, con un fútbol comedido, le alcanzó para asustar a la Liga en un remate de Byron Jiménez, que se fue al palo, pero no bastó para amarrar el boleto a semifinales.
Palacios vino del banco y tuvo al 81’ su primera opción de gol, pero el guardameta Ronny Fernández rechazó el disparo en gran forma.
Seis minutos después, le llegó la redención en un centro de Álvaro Sánchez, que cerró sin marca –y aparente posición prohibida– para darle el pase a la Liga.