Redacción
Alajuelense acusa al Deportivo Saprissa de iniciar una nueva campaña para perjudicar a Jonathan McDonald, como sucedió, según ellos, previo a la final del Torneo de Verano 2014, cuando el delantero fue expulsado al minuto 10 del partido por el título en Tibás.
En ese entonces, el extécnico morado, Jeaustin Campos, prendió la mecha en los días previos al señalar que el delantero manudo "lanzaba golpes con mala intención".
Para la dirigencia liguista, las declaraciones del técnico Carlos Watson y el presidente Juan Carlos Rojas tras el clásico, en las que dijeron que el "jugador puede hacer lo que quiera y se lo permiten", son una cortina de humo para desviar la atención del mal resultado en el duelo del domingo en el Estadio Nacional.
"Quieren achacar la culpa que en 93 minutos no pudieran empatar o ganar el clásico. Es una cortina de humo para desviar la atención de lo que pasa ahí. Aclaro, no sé qué pasa en el Saprissa y no me incumbe. Es claro que quisieron desviar la atención por una jugada dividida, buscan tapar una imposibilidad deportiva con una jugada al final del partido", dijo a La Nación Marco Vásquez, vocero rojinegro.
"Esa campaña, bien orquestada, les generó resultados en su momento, pero esta vez no lo vamos a permitir. Acuerpamos a nuestro jugador y no toleramos que se vuelva a crear una atmósfera negativa sobre él", agregó el dirigente.
Los morados culpan a McDonald de actuar con mala fe sobre el volante Marvin Angulo al filo del clásico del domingo en que donde Alajuelense derrotó 1-0 a su eterno rival.
Los saprissistas, a la salida del Estadio Nacional, señalaron que el jugador manudo hace creer que "ahora es un santo y por eso le permiten todo".
“Hay jugadores que hacen lo que les da la gana; porque yo me vuelvo rebelde y malcriado y ya después con el tiempo me tranquilizo y entonces ahora soy bueno y cualquier cosa que haga, me la van a perdonar en la cancha. Se hizo campaña para que a él se le protegiera y por eso lo perdonan”, dijo el defensor Francisco Calvo.
Vásquez sale en defensa y asegura que las declaraciones moradas buscan condicionar a los árbitros para decisiones futuras.
"No permitiremos este tipo de insinuaciones que lo que quieren es influenciar decisiones futuras de árbitros. Jonathan es un jugador que ha madurado y sigue demostrando calidad en el terreno de juego. Esa experiencia le ayudó a crecer. Podemos demostrar que nuestro delantero es uno de los que recibe más provocaciones y patadas", explicó el portavoz liguista.