EscucharEl mejor cartucho que tenía el arma ofensiva alajuelense se cebó en el momento menos indicado, pues Jerry Palacios se convirtió en el gran ausente del gol hace más de un mes.
Para recordar una celebración del catracho hay que remontarse al mes de noviembre, cuando el hondureño marcó por última vez con la Liga.
Aquel 10 de noviembre, Palacios castigó al Saprissa en aquella goleada 3-0, pero a partir de ahí su capacidad goleadora quedó perdida en el olvido.
Pasaron exactamente seis partidos completos en los que la huella del hondureño no apareció, aspecto que resintió la Liga en el cierre.
UCR, Pérez Zeledón, la serie semifinal ante la S y los dos partidos ante Herediano fueron los grandes vacíos en las redes de Palacios.
Jerry fue la apuesta en ataque del Machillo durante estos partidos, incluyendo el más importante, la final contra Herediano, una noche donde a pesar de su sequía, pudo sonreír con el título.
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El hondureño Jerry Palacios (derecha) lucha el balón con el defensor herediano Pablo Salazar. El catracho sí anotó en los penales. | RAFAEL MURILLO (Alexander Otarola Rojas )
Y está de más decir que la opción más clara que tuvo la Liga ayer fue en pies del hondureño, quien pudo matar al Herediano en su casa y con su gente, en el estadio Eladio Rosabal Cordero, pero esa falla alargó la velada hasta los penales.
El nueve manudo desperdició una opción más que clara en la segunda mitad cuando el marcador aún iba 0-0.
Tras un suculento pase de la muerte de Armando Alonso, quien había desbordado por la banda derecha, habilitó a Palacios, que pateó el balón pero sin fuerza y con la mala puntería de enviar la redonda donde se encontraba Leonel Moreira, guardameta rojiamarillo.
Jerry ha sido pilar importantísimo en la ofensiva rojinegra durante todo el torneo, concretando cinco tantos vitales para las aspiraciones manudas tanto en el Invierno y otros en la Concacaf.
Sin duda el de más peso fue aquel gol histórico con el que la Liga venció al América del México en el mítico estadio Azteca.
Por eso y por ser la punta de confianza de Ramírez durante todo el semestre, es que resulta extraño que el delantero no se hiciera presente en las redes en la recta final.
El hondureño está a la espera de ver si la Liga y él aumentan su vínculo por un par de temporadas más, por lo que si el catracho quiere continuar en la institución deberá mejorar sus estadísticas.
