En el partido hubo un equipo muy superior al otro porque tuvo el control de las acciones, cerrando las vías ofensivas del Real Madrid, e incluso haciendo que el Madrid cambiara su estilo.
Otro punto a favor del Borussia Dortmund fue que se vio muy contundente en ofensivo, con un trabajo muy importante de Marco Reus, Blaszczykowski, Mario Götze y el goleador Robert Lewandowski.
Este último tuvo una noche excepcional, mostrando mucha capacidad de marcar, desequilibrio en el uno contra uno, velocidad, movilidad y, sobretodo, personalidad.
Dicho temple y mentalidad ganadora de Lewandowski, y todo el equipo, se notó a la hora de cobrar el penal, en el que no mostró duda.
El Borussia basa su éxito en un equipo con mucho orden defensivo, formando un bloque detrás de la línea del balón que presiona para recuperar la pelota y hacer transiciones rápidas hacia la ofensiva.
Además, al igual que el Bayern Munich frente al Barcelona, tiene un muy buen nivel físico y técnico, confirmando el enorme momento del futbol alemán, al cual tengo varios años de estar siguiendo.
Esto se debe al buen trabajo de bases en lo táctico y lo físico, además de que se agrega un elemento importante, que es muy buena técnica al tratar la pelota, aunque se esté en plena velocidad.
Fue tan bueno el trabajo del control del Dortmund, que jugadores como Ozil, Higuaín y Ronaldo, entre otros, no pudieron mostrar su reconocida clase.
Lo interesante ahora es saber si el Madrid podrá cambiar la historia ante un equipo que fue muy superior. Eso será otro partido.