La selección de México sufre una pesadilla cada vez que viaja al estadio Mapfre de Columbus Ohio, donde en las últimas cuatro eliminatorias cayó derrotado por el mismo marcador: 2-0.
Los aztecas sufren en sus visitas a suelo estadounidense desde hace más de 40 años, pues su último triunfo en casa de los norteamericanos data del 10 de setiembre de 1972, rumbo al campeonato de Alemania 74.
México venció como visitante a Estados Unidos el año pasado para conseguir el boleto a la Copa Confederaciones y en la final de la Copa de Oro de 2011, pero en ambos casos se jugó en Pasadena, California.
El equipo que dirige el colombiano Juan Carlos Osorio espera romper con esta mala racha en eliminatorias, con lo que también sanarían un poco la herida de la caída 7-0 ante Chile en la Copa América Centenario, que parece estar abierta para los detractores del técnico.
“No me acuerdo del pasado, esta es una etapa nueva, con gente en Europa, casi la mitad del equipo, y eso es importante”, dijo el veterano defensor del Atlas, Rafael Márquez.
El capitán del Tri considera que los resultados de las eliminatorias anteriores no marcan el rumbo de este compromiso.
“Son épocas distintas, ya no me acuerdo de eso, vivo otra época con distintos jugadores y tratando de dejar atrás el pasado”, agregó el zaguero.
Para encarar este importante partido, Osorio dejó atrás los experimentos y citó a 14 jugadores que militan fuera de México, entre ellos los hermanos Giovani y Jonathan dos Santos, además del artillero Carlos Vela, quienes habían quedado en segundo plano desde que el colombiano asumió el cargo en octubre del año pasado.
“Queremos quitarnos ese pensamiento de que siempre que se viene acá se pierde dos a cero, hay que cambiar esa mentalidad”, dijo el volante Jürgen Damm, quien se incorporó al plantel de última hora por la baja de Javier Aquino.
La representación azteca desea evitar los problemas que tuvo en la eliminatoria anterior, en la que estuvo a minutos de quedar fuera de la Copa del Mundo de Brasil 2014 al caer en el Estadio Nacional ante la Sele , pero al final logró acceder al repechaje contra Nueva Zelanda.
“En México les gusta recordar siempre lo que ha pasado en las últimas veces que se ha jugado acá, y nosotros como futbolistas afortunadamente no pensamos en eso, estamos tranquilos y con la ilusión de arrancar con el pie derecho en el hexagonal”, comentó el portero del Granada de España, Guillermo Ochoa.
Después de enfrentar a Estados Unidos, los mexicanos visitan a los panameños en la segunda fecha de la hexagonal.
“Todos queremos cambiar la historia y sacar un buen resultado, para la selección”, agregó el mediocampista Jürgen Damm.