El reto de correr más rápido, bajar sus tiempos y alcanzar sus metas en la temporada 2016 tiene nuevo impulso para el velocista Nery Brenes: Jameela.
Así se llamará su hija, que nacerá a mediados de este mes, fruto de la relación con su esposa Sasha Sanabria.
“Ahora debemos trabajar el doble, ya tenemos al chiquitín, Jaiden y la verdad nos sentimos muy contentos. Es una gran bendición para nosotros como pareja, debemos esforzarnos aún más para sacarlos a todos adelante”, comentó Brenes.
Nery recordó que que el año en que precisamente nació Jaiden fue campeón mundial bajo techo en los 400 metros lisos en Turquía (2012), por lo que no cree que eso afectará su rendimiento deportivo, por el contrario asegura que siente una gran emoción y motivación para competir.
Año olímpico. En el horizonte Brenes tiene dos desafíos en la campaña 2016. El primero es el Mundial bajo techo en Portland, Oregon (Estados Unidos), del 17 al 20 de marzo, y después los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, entre el 5 y el 21 de agosto.
“Empezamos los entrenamientos con énfasis en velocidad, porque esperamos tener una muy buena base para llegar bien a Oregon. Queremos correr más rápido ya que a finales de la temporada anterior demostramos que podemos hacerlo y aunque en el cierre de nuestro año tuvimos pruebas con mucha cercanía, no son excusas para no haber mejorado”, dijo Nery.
Brenes realizó en los Juegos Panamericanos de Toronto 2015 un tiempo de 44:84 en agosto y menos de un mes después logró un 44:80 en la final del Torneo NACAC celebrado en nuestro país.
“Para Río aún falta mucho, pero es claro que tenemos que mejorar, la clave es correr rápido, ser constante en nuestras marcas y acatar las indicaciones de mi entrenador Emmanuel Chanto. Es la única manera en que podemos progresar y apuntar a nuestras metas”, sentenció el caribeño.
Nery también resaltó que es importante no tener una lesión seria que le quiebre el ritmo de competencia en los momentos claves de la temporada y además no tiene claro si después de la olimpiada se estará retirando.
“Aún no estoy seguro de si esté será mi último ciclo olímpico, una vez que terminé mi participación en Río voy a evaluarlo con mi entrenador y con mi familia”.
Velocidad y resistencia. Emmanuel Chanto, entrenador de Brenes, explicó que con su pupilo deberán trabajar la punta de velocidad máxima para el Mundial bajo techo y la resistencia, para mantener el ritmo a la hora de correr, en las pruebas al aire libre, como en la olimpiada.
“En este momento estamos empezando tras un largo descanso que tuvo Nery. La idea es que él pueda estar en forma a finales de febrero o principios de marzo para el Mundial en Oregon”, sentenció Chanto.
“Queremos competir en los Estados Unidos y Europa para rozarnos con los rivales, que vamos a enfrentar en las dos competencias y conocer el nivel de Brenes. Nuestra intención será correr en un 44 bajo”, puntualizó.