Cayo Hueso, Florida (AP). La australiana que abandonó la travesía a nado entre Cuba y la Florida debido a las dolorosas picaduras de las medusas dijo el jueves que no repetirá el intento.
Chloe McCardel dijo a The Associated Press que eligió el mes de junio para nadar porque se suponía que la presencia de las medusas sería escasa.
Empero, cuando llevaba 11 horas nadando como parte de su recorrido de 175 kilómetros, que debía cubrir en unas 60 horas, fue súbitamente atacada por las medusas.
“Una se me metió en la boca, intenté sacarla pero no recuerdo ese momento. Mi asesor me lo contó porque yo no lo recuerdo. No volveré a repetirlo”, afirmó.
La nadadora de 28 años originaria de Melbourne fue la última atleta atacada por las medusas en los estrechos de la Florida, por lo que el miércoles por la noche abandonó su intento de ser la primera persona en nadar sin escalas y sin una jaula contra los tiburones.
El ataque sorprendió a la atleta y a su equipo de respaldo.
“Me vi rodeada por todas direcciones”, indicó. “No lo habría intentado si hubiese sabido que había tantas en junio. No era lo que esperaba”.
Fue retirada del agua y llevada a Cayo Hueso en una de las embarcaciones de apoyo, donde descansaba el jueves en un hotel. Necesitará 24 horas para recuperarse, dijo su equipo.
Este fue el quinto fracaso de tres mujeres que han intentado cubrir la travesía en los últimos tres años.
Las medusas y las fuertes corrientes han sido los principales impedimentos.
Diana Nyad, que fracasó tres veces, dijo que le gustaría intentarlo una vez más este año. Penny Palfrey también intento la hazaña, sin éxito hasta el momento.
La australiana Susie Maroney logró cubrir exitosamente la travesía en 1997, pero lo hizo en una jaula contra los tiburones.