La seguridad de los consumidores de gas está en manos de los diputados. Desgraciadamente.
Ellos, los 57, serán los que decidirán si una nueva ley autoriza el “llenado universal” de cilindros de gas. Si aprueban ese cambio, pondrán en riesgo la vida de quienes usan gas para cocinar. Se trata, al menos, de 475.000 hogares, familias, que verán mermada su seguridad.
El cambio lo quiere un grupo de diputados de la Comisión de Asuntos Económicos, que tramita el proyecto 18.198 Ley Marco de Gas Licuado de Petróleo.
Todo en ese plan va bien hasta el artículo 17, el cual autoriza el “llenado universal”. La intención es cambiar las reglas y permitir, por ley, que cualquier empresa llene los cilindros de gas que circulan en el mercado.
El Ministerio de Ambiente y Energía y su ministro, René Castro, han advertido que ese artículo es una “bomba de tiempo”, pues llevará a que las envasadoras de gas rehúyan su responsabilidad con los usuarios.
El “llenado universal” implicará, en la práctica, que ninguna envasadora se hará responsable de mantener en buen estado un cilindro y su válvula de seguridad. Ninguna asumirá la responsabilidad de retirar un cilindro que haya cumplido su vida útil o esté golpeado. Es más, en caso de explosión, la responsabilidad se diluirá entre el número de envasadoras que haya en el país y para los afectados será mucho más difícil identificar responsables o hacer reclamos.
Ese, el artículo 17, solo favorece el negocio de envasar y no lo primordial: la vida humana.
Por ser el gas un producto de riesgo, toda la cadena de envasado y distribución debe ser transparente y, para ello, solo el llenado por marca hará que las envasadoras sean responsables de que el cilindro con su marca fue revisado para evitar fugas.
Hay que reconocer en René Castro su vehemencia para concientizar a los diputados de la seriedad de la decisión que tienen entre manos, pero, lastimosamente, no ha logrado convencerlos y hay unos que quieren votar a la ligera.
Esos diputados, extrañamente, tienen corta memoria. Olvidan que, a la 1:05 p. m. del lunes 21 de enero, una fuga de gas en un cilindro sin uso, en la soda Don Luis, en Alajuela, mató a Marlene Castillo, Génesis Murillo, Grettel Chacón, María Avellán y a Deyanira Castillo.
Por ellas y por los hogares que usan gas, deben ser rigurosos y no dejar portillos de inseguridad, como ese artículo 17.