Respecto al reportaje de La Nación publicado el pasado 28 de julio, “Lucha de enfermeras salva a bebé que nació a los 5 meses”, en la portada aparece indicado que en Costa Rica sobreviven niños de 22 semanas.
Deseo señalar que esto no es cierto, pues el 100% de los niños que nazcan con esa edad real concepcional fallecen debido a inmadurez extrema.
Por otra parte, la viabilidad de nuestro hospital, revisada en el primer trimestre de este año, corresponde al 50% del grupo etario, de 700 a 800 gramos al nacer, de 28 semanas y de 800 gramos.
En otros países más desarrollados, a los grupos etarios los analizan en conjuntos de menor cantidad de gramos (ejemplo: cada 50 gramos) y la sobrevida la elevan al 75% del total de niños que nacieron en ese grupo.
Por ejemplo, en Estados Unidos la sobrevida está para 420 gramos y 24 semanas (pero con la consecuencia de que se presenta mucha discapacidad).
Por lo tanto, obviamente, jamás nosotros vamos a estar por encima de esos países desarrollados, ya que los criterios de calidad del control prenatal no son iguales, ni el acceso de la mujer embarazada con amenaza de parto prematuro es similar a los criterios que, por diversas razones, se manejan en nuestros hospitales.
Costos. Otro asunto a aclarar es el relacionado con los costos. Estos se deben a un promedio de todos los aspectos que se utilizan en el manejo de los pacientes graves, tales como: salario del médico, de las enfermeras, de las auxiliares de enfermería, del asistente de pacientes, estudios de rayos X y de laboratorio, agua, luz, teléfono, limpieza, consumibles, activos, etc.
Asimismo, la atención de estos pacientes recae en todo el equipo multidisciplinario, no solo sobre las enfermeras, de manera que el mérito de la sobrevida, o de la pelea para salvar a estos bebés, cae sobre todo el personal que interviene en dicha atención.
Por último hay que señalar que entre el 30% y el 40% de los prematuros nacidos en nuestro hospital correspondieron al grupo de los pacientes internados, y no incluye a los pacientes de alojamiento conjunto (los que permanecieron con su madre).
Alicia M. Boza M., jefa del Servicio de Neonatología, Hospital de las Mujeres.