Los logros de trabajar juntos

Este logro vino del trabajo conjunto de una comisión en la que participaron los diez sectores que integran la Asamblea, y que son estos: los artesanos, los autogestionarios, los cooperativistas, los comunalistas, los del magisterio nacional, los profesionales, los sindicatos confederados y los no confederados, los solidaristas y los trabajadores independientes.

Durante más de 24 meses, los representantes de todos estos sectores, en forma digna, responsable y ad honórem, fuimos resolviendo cada uno de los obstáculos del proceso, adoptando con firmeza y honestidad todas las decisiones necesarias para lograr integrar ese órgano. Nos vimos expuestos a recursos de amparo, acciones de inconstitucionalidad, juicios contenciosos, apelaciones, entre muchos otros actos dilatorios, todos declarados sin lugar, y gestados por algunos pocos inconformes que pretendían obstaculizar que los sectores sociales de este país hicieran efectivo el mandato legal de orientar la política institucional del Banco Popular. Mandato que conlleva el nombramiento de 4 de los 7 directores de su Junta, de un Directorio y de varias comisiones de trabajo, como la financiera, la de la Mujer y el Comité de Vigilancia. Todos estos nombramientos se realizaron legítima y válidamente el pasado 12 de enero.

Hablamos de los logros del trabajo conjunto, no solo por el trabajo realizado por quienes estuvimos fungiendo como órgano electoral del proceso que, valga decir, no participamos de ninguna candidatura, ni nombramiento; sino, y sobre todo, por el trabajo de cada uno de los sectores que integran la Asamblea, de sus dirigentes, de sus delegados y delegadas. Durante estos meses hemos visto a solidaristas, sindicatos, cooperativistas, artesanos, comunales, entre otros, sumando esfuerzos, olvidándose de las diferencias y apostándoles a las coincidencias.

La asistencia a la Asamblea Plenaria del 12 de enero pasado ha sido la mayor de los últimos 25 años, participó un 90 % de sus miembros; las decisiones se tomaron por una mayoría del 86% de sus delegados y delegadas. Primó un ambiente de armonía, respeto y responsabilidad.

No hay duda que después de más de dos años de existir en el Banco Popular una Junta Directiva provisional, nombrada por el Gobierno, llegó la hora de que los trabajadores y trabajadoras de este país retomen su dirección política. Se preguntarán ustedes: ¿para qué, si es un banco sólido y eficiente? Es cierto, es una institución financiera robusta y exitosa, y ha sido así a partir de la creación de la Asamblea de Trabajadores, en 1986. Sin embargo, este país exige y espera más de una institución financiera que pertenece a sus trabajadores, y que aún tiene pendientes con la sociedad; este país exige mas inclusión financiera, más accesibilidad a los servicios, más integración con los sectores de la economía social, más democracia económica.

Hoy, con la frente en alto, rendimos cuenta a los trabajadores y trabajadoras de este país, dueños del Banco Popular. Cuentas claras de nuestro trabajo, de nuestro compromiso, de nuestra honradez, como lo han hecho durante 26 años los trabajadores de este país. Afirmando que sí podemos ponernos de acuerdo, podemos fijar nuestro rumbo en forma autónoma, podemos asumir los desafíos económicos y sociales con la entereza que merecen los hechos. Este logro refleja las voluntades de todos nosotros, de todos ustedes, trabajadores y trabajadoras de este país. Y como tal, merece ser respetado.

Instamos al Gobierno de la República a respetar la voluntad de los trabajadores y sus organizaciones. Lo instamos a permitir que los trabajadores de este país asuman el control de esa Junta Directiva. Instamos a quien hoy ostenta la Presidencia del Banco, hombre notable, abogado y filósofo, a que deponga su interés de permanecer presidiendo ese órgano contra la voluntad de sus copropietarios, y permita que se restituya la legalidad y el buen gobierno corporativo en el Banco Popular.

Freddy González Rojas. Presidente Comisión de Acreditación. Asamblea de Trabajadores y Trabajadoras del Banco Popular