En la columna En vela del 23 de noviembre del presente año, don Julio Rodríguez manifestó su preocupación acerca de un recurso de reconsideración, el cual está en estudio, interpuesto por los doctores Víctor H. Pérez H. y Aristides Baltodano A., a un informe elaborado por la Defensoría de los Habitantes y el cual fue presentado recientemente ante el gerente médico de la Caja Costarricense de Seguro Social, la ministra de Salud, el director y el personal involucrado del Hospital Nacional de Niños. Cabe mencionar que durante la presentación del informe, todas las personas presentes estuvieron de acuerdo con las recomendaciones de la Defensoría.
Al no pronunciarse sobre los hallazgos de la Defensoría, sino simplemente tomar algunos argumentos de los recurrentes, menester es informar a don Julio y a la ciudadanía que la Defensoría de los Habitantes inicia de oficio una investigación para analizar y determinar los motivos que podían estar incidiendo en el porcentaje de mortalidad por cirugías cardiacas y mortalidad quirúrgica de las/os pacientes menores de edad, a los cuales se les diagnostica y se les realiza una cirugía cardiaca (a corazón abierto o a corazón cerrado) entre los años 2009-2010, producto de una afectación por una cardiopatía congénita en el Hospital Nacional de Niños. La finalidad de la Defensoría es recomendar aspectos técnicos y administrativos para mejorar las condiciones de gestión en que se operan los niños y niñas en dicho hospital.
Investigación rigurosa. Muy al contrario de lo manifestado por don Julio Rodríguez, quien indica textualmente, y ahí radica la debilidad de su posición, “según el citado recurso, carece de todo fundamento científico u objetivo, es decir, de seriedad, a tal grado que la Defensoría basa la mayoría de sus conclusiones en el oficio DG-923-11 del 11 de julio del 2011, suscrito por el Dr. Rodolfo Hernández, director general del propio Hospital Nacional de Niños”, la investigación que realiza la Defensoría se basa en el método científico social requerido para ello, el cual implica recolección y análisis de datos cuantitativos y cualitativos aportados por fuentes primarias y secundarias, mediante la solicitud de forma escrita y entrevistas a personas claves relacionadas con la investigación.
El análisis cuantitativo descriptivo incluye el estudio detallado, con el apoyo de los especialistas en Cardiología del Hospital Nacional de Niños sobre la base de datos de egresos de pacientes en los años 2009-2010 aportada por el Hospital Nacional de Niños. Durante la investigación, se realizaron entrevistas a los profesionales encargados de la Unidad Cardiaca, Servicio de Cardiología, Enfermería, Unidad de Cuidados Intensivos, Departamento de Estadísticas.
Por último, se contó con el apoyo técnico de la Escuela de Matemática de la Universidad Nacional, la cual facilitó un especialista en Estadística y profesor de Bioestadística en la Maestría de Salud Pública, quien colabora en el análisis cuantitativo que respalda el informe. Por eso, los resultados del informe están basados en hechos concretos, con la rigurosidad científica que se requiere en un estudio, por lo que resulta incomprensible que se quiera emitir una crítica sin la totalidad de los fundamentos, basados exclusivamente en una acción que aún está pendiente de resolver, y a pesar de que todos los datos emitidos en el informe de la Defensoría resultaron contrastados, analizados y debatidos a través de todo el proceso de investigación.
El documento que indica el recurso que menciona don Julio en su columna es solo uno de tantos oficios que se reseñan en el informe, igual que se reseña y hasta se recomienda a las autoridades de la CCSS acatar las recomendaciones de la Auditoría.
Fundamentación técnica. El informe es serio, equilibrado y técnicamente fundamentado. Tanto así que las recomendaciones fueron ya asumidas por las autoridades del Ministerio de Salud y la CCSS, que desde ya han adoptado acciones para mejorar los procedimientos que lleva a cabo el Hospital Nacional de Niños.
Por supuesto que los resultados en el informe son preocupantes, razón por la cual la Defensoría asume con seriedad la situación y se puntualizan las responsabilidades de cada una de las partes involucradas, y así lo han entendido las autoridades competentes para la búsqueda de respuestas y acciones. Igualmente la Defensoría determina que no es posible hacer comparaciones sin tener validados los parámetros de referencia.
Dado que don Julio parece no disponer del amplio informe de la Defensoría, se lo remitimos para que pueda tener el detalle, con el fin de que su opinión contemple todas las aristas y pueda realizar una valoración de los instrumentos metodológicos utilizados, con el objetivo de que pueda constatar la rigurosidad técnica y de los resultados alcanzados que fueron del conocimiento de la opinión pública en su oportunidad, y, además, para que pueda conocer la respuesta al cuestionamiento de por qué sale la Defensoría oficiosamente a defender a niños y niñas que requieren de una cirugía cardiaca.