San José es una de las mejores ciudades de Latinoamérica. El dinamismo de su economía genera empleo. Su vida cultural atrae visitantes de todo el país. La capital atiende sus deficiencias y construye su futuro. El diario La Nación ha registrado, en numerosos reportajes y comentarios editoriales recientes, los avances de nuestra ciudad. Por eso sorprende el pesimismo del contradictorio reportaje publicado el pasado 7 de agosto.
¿Habrá cambiado repentinamente la realidad? Lo que varió es el color de los anteojos, pues ¡comenzó la campaña política!
Voy a aclarar apreciaciones incorrectas que contiene el mencionado reportaje. Confío en la buena fe del periódico para dar a mi “derecho de rectificación” un despliegue comparable a la difusión masiva de numerosas inexactitudes que me agravian.
The Economist , prestigiosa revista internacional, dice que San José de Costa Rica y San Juan de Puerto Rico son los mejores lugares para vivir en Latinoamérica.
CNN , la influyente televisora mundial, afirma que San José es una de las cinco mejores ciudades de Latinoamérica.
The Financial Times , el importante periódico británico de negocios, apunta a San José como una de las diez ciudades latinoamericanas del porvenir.
En efecto, la ciudad ha avanzado notoriamente durante las últimas dos décadas. La recuperación de los espacios públicos, seguridad ciudadana, agenda cultural, repoblamiento, programas sociales, deporte, recreación y medio ambiente son parte de los muchos esfuerzos que han ayudado a renovar y modernizar nuestra capital.
¿Alcanzaría para tanto el supuesto “maquillaje” que se pretendió detectar con esos anteojos oscuros?
¿Solo 27% de metas cumplidas como dice el reportaje? Lo contrario es lo cierto. A lo mejor hubo un error tipográfico porque el Departamento de Planificación de la Municipalidad de San José dice que en el 2011 se cumplió el 75% de las metas y, en el 2012, el cumplimiento fue de 71%.
¿Hay 1.255 tugurios? Lo que el reportaje oculta es el avance en la disminución de tugurios, que bajaron de 2.585 que había en el 2000 a 1.225 en el 2010, según datos del INEC.
¿Solo 53 cuadras de cableado subterráneo? La verdad es que son 400. ¿A qué obedece el intento de esconder 347?
Insisto en el respeto a la buena fe, elemento esencial en la democracia. ¿Por qué asustar con medias verdades y cifras incorrectas? ¿Dónde quedó arrinconado el equilibrio del periodismo?
San José es un dinamo de la economía nacional. Emplea al 28% de la fuerza laboral del país.
Es una ciudad relativamente próspera. La pobreza alcanza al 21% de la población nacional, pero solo al 11% de la población capitalina, según datos del INEC.
¿Cuántos reportajes publicó La Nación sobre el relleno de Río Azul? Se abrió un relleno en La Carpio, se cerraron dos tercios de 300 basureros clandestinos, la recolección de basura y el aseo de vías mejoró notablemente con una flota de 20 recolectores, nuevos casi todos.
¿Cuál capital del mundo en desarrollo no tiene ventas ambulantes? Y ¿los vendedores ambulantes de Nueva York, Madrid y París? La Nación publicó muchos reportajes sobre los chinamos que antes ocupaban las aceras. San José controló el problema y los ciudadanos pueden caminar por calles, bulevares y parques. Claro, mientras haya inequidad, habrá ambulantaje.
La palabra “chapulines” desapareció del lenguaje periodístico. ¿Por qué? Creamos la Policía Municipal, que va por 400, pusimos en marcha una red de 80 cámaras de vigilancia y un sistema de monitoreo con más de 3.000 clientes.
Solo el Gobierno nacional tiene capacidad para instalar el tranvía. La Municipalidad logró que se completara el estudio de factibilidad que permitirá que este proyecto se ejecute en los años próximos. Ojalá se hubiera tenido el presupuesto y la potestad legal para haberlo resuelto con los recursos financieros y legales del municipio.
Sí, hay problemas por resolver. Ocultar los avances ¿será cosa de miopía? ¿Se necesitan otros anteojos?
A los habitantes de la capital les consta la verdad de lo realizado hasta ahora. Juntos hemos construido una ciudad mejor, proceso que prosigue. Agradezco a La Nación que me declarara en el 2005 figura cultural del año, sus reconocimientos a los programas sociales y sus editoriales por el renacimiento del centro urbano. Tres veces presenté mi nombre a los electores josefinos y tres veces me confiaron la conducción del gobierno del Cantón Central.
La experiencia me ha enseñado el valor del sentido común en la solución de retos políticos complejos. En la Alcaldía demostré que se pueden tender puentes entre partidos distintos para resolver problemas.
Mi naturaleza optimista e incansablemente trabajadora armoniza con el deseo de construir que anima a la mayoría de mis compatriotas.
Esa experiencia fructífera de 20 años es la que ofrezco a los costarricenses, que, en su mayoría, reconocen mi capacidad para impulsar al país por la senda de mayor progreso y justicia social.