La profesora Ana María Bernini, directora de la Escuela Golden Valley de San Isidro de Heredia, recibió al final del mes de agosto cuatro reconocimientos de la XII Cumbre Iberoamericana “Líderes del Milenio, Unidos para una Educación con Amor y Valores”, en San Juan de Puerto Rico.
Es este un muy valioso reconocimiento del Consejo Iberoamericano en honor a la calidad educativa, porque revela el mérito que se otorga al sentido profundo de la educación, a su valor espiritual y formativo del ser humano, al contenido más que a lo cuantitativo (lo cual, sin embargo, no se puede desechar).
Ciertamente el reconocimiento recibido por la directora de la Escuela Golden Valley la acredita precisamente como doctora honoris causa summa cum laude y trofeo en honor a la Excelencia Educativa 2012, así como también medalla de máster en Administración Educativa.
Este certificado de excelencia en honor a la calidad educativa, recibido por la profesora Bernini, es, además, una verdadera distinción para nuestro país, la cual recuerdo yo que la recibió también en cierta oportunidad el profesor Uladislao Gámez, también en Puerto Rico, acto en el que me correspondió estar presente puesto que desempeñaba el cargo de ministra de Educación.
Considero que esta distinción recibida por la profesora Bernini nos debe halagar profundamente a todos los educadores.
Implica, desde luego, la importancia que debemos darle siempre a la formación integral de la educación y el mérito a los valores espirituales.
Pienso, a la vez, que el Consejo Superior de Educación habrá de tomar muy en cuenta este hecho tan significativo, a fin de propiciar con énfasis el sentido profundo de la educación, ya que antes del año 2000 fue muy característico destacar más lo cuantitativo.
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