Cada vez hay más pasajeros que viajan con sus mascotas. Por eso, el aeropuerto O’Hare de Chicago, el de Seattle-Tacoma y el JFK de Nueva York han abierto áreas de servicio para animales. Así, quienes viajan con sus perritos o gatos no tienen que salir de la terminal aérea para que estos hagan sus necesidades.
La medida es más importante cuando deben hacerse trasbordos con poco tiempo entre los vuelos. Las áreas incluyen una zona cubierta de césped artificial, bolsas plásticas para recoger heces y un hidrante que limpia desechos.
Pronto, una regulación federal obligará a todos los aeropuertos estadounidenses que den servicio a más de 10.000 pasajeros al año a instalar áreas para mascotas ( La Nación 30/4/2016). Para comparar, baste con decir que en el 2014 el aeropuerto Juan Santamaría recibió 3,7 millones de pasajeros.
En Costa Rica van en aumento los hoteles, las tiendas, las áreas de recreo, los parques, los restaurantes y los comercios diversos donde es posible ingresar con las mascotas, parte de las familias. Apostamos así por espacios inclusivos, donde podamos departir sin discriminaciones.
La autora es odontóloga y salubrista pública.