El pasado 24 de abril, en la página 32 A de Foro de este medio de comunicación, el Lic. Guillermo Bonilla Vindas publicó un artículo titulado “De huevos y megáfonos”.
La Municipalidad de Desamparados desea aclararle al Lic. Bonilla y a los estimables lectores de LaNación que el cantón de Desamparados es uno de los más extensos del Valle Central con 118 km² y 550 km² de rutas nacionales y cantonales, además de ser el tercero más poblado del país, por lo que es difícil controlar los vehículos que con megáfonos, pregonan y se dedican a las ventas ambulantes, debido a que no son negocios fijos y los automóviles se movilizan rápidamente por diferentes lugares.
Sí es un deber garantizar un ambiente sano y para ello el Estado ha asignado en sus distintos componentes las respectivas competencias. Sin embargo, es importante que la ciudadanía colabore con las autoridades denunciando de forma inmediata la situación de ventas móviles, para poder localizarlos y tomar las respectivas medidas.
Según Decreto Ejecutivo 28718-S, se establece que es competencia del Ministerio de Salud controlar esta clase de ruidos, por lo que la municipalidad no tiene los recursos técnicos ni la competencia legal para controlar este tipo de ventas.
Se reafirma que para tener un ambiente sano, respeto a la intimidad y el derecho a la salud, se debe evitar la contaminación sónica, pero es una regulación que debe darse por parte del Ministerio de Salud y del Ministerio de Transportes y no del municipio desamparadeño como se mencionó en este artículo.
Es así como la ley N.° 9078, en su artículo 116, establece que la autorización y el uso de los vehículos con altoparlantes deben acatar ciertas reglas que son supervisadas por el órgano competente del MOPT, así como el artículo 130 y 147 determina prohibiciones que deben ser inspeccionadas por este ente.
El gobierno local realiza operativos coordinados con la Fuerza Pública y el Ministerio de Salud, para hacer cumplir la ley de patentes, controlando de esta forma las ventas ambulantes que se apostan en las vías públicas y que no cuentan con la licencia correspondiente y se les ha decomisado mercancía que tienen bajo el modelo de negocio. Sin embargo, el control de las ventas bajo la modalidad de vehículos que se realizan constantemente apoyados en megáfonos es un tanto difícil y se hace necesario en dicho control la integración del usuario, en el sentido de que colaboren con el reporte de estas ventas y con no consumir dicha mercancía.