La situación actual de la salud en Costa Rica, en todos los ámbitos, a pesar de presentar índices propios de un país desarrollado, muestra una gran complejidad que acentúa la necesidad de implantar cambios profundos en la organización y el funcionamiento del sistema para brindar una respuesta organizada y efectiva a las necesidades de las poblaciones.
Esta situación, a pesar de los buenos resultados históricamente obtenidos, quedó evidenciada en la atención de la emergencia por la pandemia del virus influenza AH1N1, que apareció en abril del 2009, así como por los constantes brotes de dengue, sobre todo en este último año, en el que se ha sobrepasado el nivel esperado de casos en varios miles. Igual atención se debe prestar a otro tipo de eventos de la salud individual o social.
Con este panorama, la construcción, el análisis y la utilización del conocimiento representan una condición indispensable para, a partir del análisis de la realidad del país, anticipar las necesidades de salud de las poblaciones, identificar condiciones de riesgo, orientar la definición de prioridades, realizar intervenciones de impacto y maximizar el aprovechamiento de los recursos, características propias de los tomadores de decisiones y directores de programas de salud pública.
En este contexto, el fortalecimiento de la capacidad del personal que se desempeña en las instituciones relacionadas con la salud pública, en funciones de análisis, planificación, negociación y evaluación en los diferentes niveles de gestión, adquiere un lugar muy relevante.
Epidemiología como referente. Los elementos conceptuales y metodológicos de la epidemiología se constituyen en herramientas fundamentales para apoyar la toma de decisiones en todos los niveles de gestión, tanto en las instancias técnicas que formulan y evalúan las políticas, programas y planes nacionales, como en aquellas responsables de realizar intervenciones dirigidas a transformar los problemas de salud pública.
La epidemiología es una disciplina científica que analiza los determinantes del proceso salud/enfermedad (factores biológicos, económicos, ecológicos y sociocul-turales) responsables de la aparición, distribución, frecuencia y agravamiento de las enfermedades en las poblaciones humanas y animales.
Así, la epidemiología apoya macroprocesos en el nivel estratégico de la vigilancia, investigación, regulación, dirección y conducción; pero, también, es requerida en el interior de los sistemas de salud, ya que brinda herramientas metodológicas para la jerarquización de prioridades y la selección de estrategias de intervención, el monitoreo de las acciones y la evaluación de resultados e impacto, entre otros.
Desde esta perspectiva, para las instituciones del sector de la salud pública, la investigación, la vigilancia y la planificación son elementos que deben estar intrínsecamente articulados. Además, deberán identificar, sustentar y proponer estrategias, junto con la ejecución de medidas que promuevan la calidad de los servicios y permitan avanzar hacia el mejoramiento de las condiciones de vida de las poblaciones.
En el ámbito de la vigilancia (epidemiológica y de la salud), el empleo adecuado de los conceptos y métodos de la epidemiología, amplía su perspectiva tradicional dirigida, fundamentalmente, al monitoreo de los problemas de salud mediante el empleo de sistemas de información de denuncia obligatoria. La epidemiología permite trascender el enfoque tradicional reactivo de la vigilancia, circunscrito al manejo de problemas sujetos de notificación, para convertirse en un instrumento de monitoreo vinculado con la acción.
La epidemiología se constituye, por lo tanto, en una herramienta fundamental para la adecuada gestión en salud pública, y pieza básica en el proceso de reforma real del sector salud.
Investigación activa. Antes de 1997, en Costa Rica, las personas formalmente preparadas en epidemiología eran muy pocas. Por eso, mediante una iniciativa de la Organización Panamericana de la Salud, auspiciada por el Ministerio de Salud y la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS), la Universidad Nacional (UNA) inició la impartición de la Maestría en Epidemiología.
Hasta la fecha, la UNA ha formado a cerca de 170 profesionales de las áreas de medicina, odontología, microbiología, medicina veterinaria, agronomía, enfermería, administración de servicios de salud, biología, promoción de la salud, entre otros, con un enfoque en la formación de capacidades de investigación aplicada: investigación para la acción.
Lamentablemente, solo parte de los egresados pueden desarrollar estas habilidades, pues muchos de ellos se ven absorbidos por sistemas en los que la investigación no es prioridad. Es frecuente que ellos estén en la labor de “contar y registrar eventos”, sin la posibilidad real del análisis. Entonces, ¿cómo es posible tomar decisiones?, ¿cómo cumplir con principios de medicina preventiva?, ¿cómo definir prioridades?, ¿cómo establecer estimaciones de carga de enfermedad si, inclusive, hasta en el ejercicio de “contar y registrar eventos” se falla, sea por desconocimiento o por falta de apoyo real institucional?
Estamos en medio de una coyuntura en la que el principal ente prestador de servicios en salud de Costa Rica, la CCSS, atraviesa por serios problemas económicos que traen consigo serios problemas en la atención oportuna de los pacientes. Se ha demostrado que, por una razón u otra, la promoción de la salud, hoy mal llamada mercadotecnia de la salud, no ha funcionado lo bien que se espera y, por eso, tenemos niveles alarmantes en enfermedades crónicas no transmisibles como diabetes, hipertensión y obesidad, además de las infectocontagiosas no inmunoprevenibles.
Así las cosas, definitivamente, la labor investigativa, más que la simplemente operativa, de quienes tienen formación universitaria en epidemiología y salud pública, debe ser retomada por los entes prestadores y gestores de la salud. ¿Se puede planificar sin datos, sin análisis, en otras palabras: sin investigación realizada profesionalmente? Sí, todo ello en un esfuerzo conjunto entre todos los actores del sector salud, o sea, todas las personas de este país.