En las últimas semanas han destacado algunas noticias del acontecer científico y tecnológico que son importantes recordar: primeramen- te, la designación del Dr. Rodrigo Gámez, presidente de Inbio como uno de los premios Magón 2011. Por otro lado, el reconocimiento al Dr. Franklin Chang Díaz como integrante del Salón de la Fama de los Astronautas de Estados Unidos, y, finalmente, la oportunidad que tendrán 11 colegiales costarricenses de participar en la Feria Internacional de Ciencia e Ingeniería de Intel (ISEF), a celebrarse en Pittsburgh, Pennsylvania, EE. UU.
Estos hechos, entre muchos otros, evidencian que Costa Rica tiene los insumos para destacar mundialmente como un país en donde un activo clave para producción es el conocimiento de los ciudadanos, que, bajo las condiciones adecuadas, puede ser la base de un modelo de desarrollo fundamentado en la educación, juventud, la innovación y la competitividad.
Condiciones adecuadas son aquellas que favorecen, estimulan y promueven el desarrollo de las habilidades y potencian los talentos para producir ideas innovadoras que se transformarán en obras tangibles con probabilidades importantes de éxito.
Algunas actividades concretas que se han propuesto podrían ir dirigidas a
•Mejoramiento de condiciones al emprendedurismo científico y tecnológico.
•Adopción de una política de estado de incentivos a la innovación.
•Ampliación del financiamiento de proyectos de capital de riesgo.
•Fortalecimiento de las ferias científicas de ciencia y tecnología.
•Creación de redes de colaboración y conocimiento.
•Estimulación a las vocaciones científicas.
•Reconocimientos específicos a la labor científica y tecnológica, en áreas como el desarrollo de software, biotecnología, entre otras.
Ahora bien, Costa Rica ya cuenta con iniciativas muy robustas y elaboradas en la línea de fortalecer la plataforma necesaria para el modelo de desarrollo propuesto. Solo para mencionar, podríamos citar proyectos y programas cuya concepción se ve cimentada en mentes brillantes de nuestro país, tal el caso del Plan Nacional de Ciencia y Tecnología, la Estrategia Siglo XXI el programa Costa Rica Verde e Inteligente 2.0.
Finalmente, creo importante incrementar esfuerzos en la promoción y divulgación de todas estas iniciativas amparadas en la oportunidad de que todos los costarricenses puedan apreciar, en conjunto, los grandes avances en el tema científico y tecnológico asociados al inmenso universo de oportunidades para el crecimiento empresarial, individual y colectivo que estos representan.
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