Un principio básico de finanzas es que se debe gastar lo que se tiene capacidad de pagar. El que gasta más de lo que le ingresa, puede endeudarse. Pero, si sus ingresos no crecen lo suficiente con el tiempo como para pagar sus necesidades en el futuro, más la deuda adquirida en el pasado con sus intereses, se da un problema.
La tendencia consumista lleva a muchas personas a gastar más allá de su capacidad. Aunque ya tenga un artefacto igual en casa, hay gente que no puede vivir sin el último modelo. Las imágenes de locura en los malls durante este Black Friday son reveladoras. Gente haciendo largas filas desde la madrugada, para luego correr desesperadamente al abrirse las puertas de la tienda. Y, luego, ¡el tarjetazo!
No tiene nada de malo endeudarse. Es una herramienta muy útil para nivelar ingresos y gastos a través del tiempo. Para que sea útil, hay que tomar en cuenta ingresos y gastos, actuales y futuros. Sobre todo, hay que pensar en cómo pueden ayudar los gastos de hoy a generar más ingresos mañana, y pensar que en el futuro siempre habrá gastos imprevistos.
Lo mismo se aplica para los Gobiernos. Muchas veces, los ingresos no cubren los gastos del periodo, por lo que los Gobiernos recurren al endeudamiento. En el futuro, los ingresos deberán superar los gastos, para poder pagar esa deuda con sus intereses. Esa capacidad de pago en el futuro dependerá, en gran medida, de cómo esté el Gobierno gastando el dinero hoy.
Como ejemplo, veamos lo que está pasando con varios países productores de petróleo. Sus ingresos anuales se multiplicaron varias veces cuando el precio de petróleo pasó de $40 por barril a unos $120. Algunos Gobiernos de estos países hicieron planes, como si el precio se quedaría por siempre ahí arriba. Se dedicaron a gastar en lujos y banalidades, sin preocuparse mucho de su capacidad de producir en el futuro.
Hoy, que viene bajando el precio, algunos de estos Gobiernos están en grandes problemas. Según un artículo del Wall Street Journal, países como Nigeria, Irán y Venezuela necesitan que el precio del petróleo sea superior a $120 por barril para balancear su presupuesto del 2015. Libia requiere un precio de ¡$180! Mientras tanto, otros países como Kuwait, Qatar, Emiratos Árabes Unidos o Ecuador pueden sobrevivir bien con precios de $80 por barril o menos.
Estas diferencias están provocando conflictos internos en la OPEP, que podría hacer que el precio del petróleo baje aún más. ¡Ojo!: no es un problema de ingresos, sino de que unos gastan más, o más mal, que otros.