El candidato presidencial del Partido Acción Ciudadana reta a su contendor liberacionista a promover un debate entre los equipos económicos de las dos agrupaciones para esclarecer sus planteamientos sobre la situación fiscal. Es una discusión esencial y, por fortuna, Johnny Araya aceptó el reto. Ojalá se produzca con prontitud y, si es necesario, se extienda a una segunda cita.
El país encara un déficit del 6% del PIB, con tendencia a crecer si no se adoptan medidas urgentes. Don Luis Guillermo Solís ya descartó la posibilidad de promover una reforma fiscal durante los primeros dos años de su gobierno y ofrece, primero, demostrar a los ciudadanos su capacidad para adoptar buenas prácticas de inversión de los recursos públicos. Por lo pronto, promete recortar unos ¢50 mil millones en gastos superfluos. Pero esa suma representa un porcentaje ínfimo de los ¢1.338.780,6 millones de déficit habido el año pasado.
Acción Ciudadana debe tener otras propuestas y es importante darlas a conocer. Si no se encaminan a procurar nuevos ingresos, necesariamente se orientarán a recortar gastos en otros rubros. Es preciso saber cuáles. Solís también se ha mostrado partidario de mejorar la recaudación de los ingresos existentes. Eso no lo distingue de sus rivales políticos. Quizá la diferencia esté en los métodos. Es preciso especificarlos para valorar las posibilidades de éxito.
Las sumas necesarias para cerrar el déficit fiscal son astronómicas. También lo es la evasión, pero el simple reconocimiento del monto evadido no garantiza la recaudación. La pregunta no es si los mecanismos destinados a mejorarla son necesarios, sino si son capaces de cerrar la brecha entre ingresos y egresos en el plazo impuesto por las circunstancias.
Araya también se pronuncia por mejorar la recaudación y recortar gastos. El debate debe servir, de la misma forma, para explicar los detalles de esos planteamientos desde la perspectiva liberacionista. En su caso, la generación de nuevos recursos es un elemento central del plan económico, pero es indispensable saber en qué consiste su propuesta de reforma tributaria.
La feliz idea del candidato de Acción Ciudadana y su aceptación por parte del liberacionista ofrece al país la posibilidad de atestiguar una discusión de fondo sobre uno de los temas económicos más apremiantes. Servirá, asimismo, para consolidar las posiciones de los dos partidos, brindándoles seguridad a los actores económicos sobre las políticas a esperar en cualquiera de los dos posibles gobiernos, cuyos compromisos de campaña quedarán más claros y firmes después de la discusión.