Tráfico de órganos

EscucharEscuchar

Que un diario como el New York Times publique en sus primeras páginas un artículo sobre el país es normalmente motivo de regocijo, pero, si la nota nos vincula al tráfico de órganos –en este caso: de riñones–, se trata de una verdadera vergüenza y una amenaza a nuestros esfuerzos de convertirnos en un importante destino para el turismo médico.








En beneficio de la transparencia y para evitar distorsiones del debate público por medios informáticos o aprovechando el anonimato, la sección de comentarios está reservada para nuestros suscriptores para comentar sobre el contenido de los artículos, no sobre los autores. El nombre completo y número de cédula del suscriptor aparecerá automáticamente con el comentario.