Doble cobro
El 11 de noviembre efectué una compra con mi tarjeta de débito del Banco Nacional de Costa Rica en un supermercado en San Francisco de Dos Ríos, pero me hicieron un doble cobro. Me he comunicado con el Banco, me hacen completar una serie de documentos (como era hace 15 años), y debo esperar 55 días para que resuelvan. La compra es pequeña; no obstante, ¿qué sucedería si fuera por un monto significativo?
Roberto Sáenz Elizondo, San José
Cargos adicionales
El 30 de octubre revisé los movimientos de mi cuenta de débito y encontré dos cargos que suman $12, monto que cuando adquirí el producto no eran parte del contrato. Al proyectar el impacto anual de esta decisión del BAC en mi presupuesto no es rentable pagar una mensualidad que decidieron imponerme de manera unilateral y que no me genera ningún beneficio.
El 30 de octubre hice un tramite para que realizaran la reversión, contacté al Banco de nuevo el 8 de de noviembre y todavía no tengo respuesta.
Cristian Fernández Quirós, Turrubares
Ayudas diferentes
Soy feminista y de mente abierta; sin embargo, cuando por esta época comenzamos a ver los detalles de “los sueños de navidad”, que promueven ayudar a personas con situaciones de pobreza extrema, lo cual es muy loable, me asombra la gran cantidad de madres solteras que viven en condiciones paupérrimas con tres o más hijos a sus espaldas. ¿Ayudar a estas personas es realmente hacer lo correcto? ¿No es irresponsable de estas madres traer hijos al mundo sin ni siquiera tener un techo para ofrecerles? En un mundo moderno, con información sobre educación sexual y de anticonceptivos, ¿cómo es posible que estas mujeres sigan trayendo hijos al mundo en esas condiciones?
Me cuestiono si hacemos lo correcto y si al hacerlo de alguna manera se fomenta una situación social grave. ¿No deberíamos empezar por educar a estas personas y enseñarles un oficio que les ayude a vivir un poco mejor?
Soledad Rojas Rodríguez, Curridabat
Viejas prácticas
Hace días se viene hablando del caso del cemento chino en el que se involucra a personas de los tres poderes de la República. Esto me hace recordar que hace muchos años, en un cantón alejado de San José, el presidente de la República de ese entonces le otorgó una línea de buses a un partidario suyo, a pesar de que el estudio técnico realizado por el Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) señalaba que no se requería de un nuevo servicio, porque la empresa que ya existía viajaba con las unidades vacías y tenía buses guardados por el poco pasaje.
Como la empresa existente tenía horario de salida del cantón a las 5 y a las 6 de la mañana, por decreto ubicó a la empresa para que saliera a las 5:30 de la mañana, es decir, en medio de los horarios de la otra empresa, con el fin de arruinarla, a pesar de que había colaborado el día de las elecciones al entonces candidato a la presidencia.
Efraín Solís Ureña, Moravia
Poca vigilancia
No podemos desconocer la importancia de las compañías constructoras en la rehabilitación de carreteras, limpieza de cauces y otros trabajos urgentes generados por emergencias, como en el caso de la tormenta Nate, pero por tratarse de labores contratadas por horas, y porque son recursos del Estado, hace falta mayor supervisión.
Estuve en varios frentes de trabajo donde no aparecían por ningún lado funcionarios del Consejo Nacional de Vialidad, la Comisión Nacional de Emergencias o las municipalidades. Aparte de esto, son trabajos que, aunque son emergentes, requieren un acompañamiento de profesionales.
Queda el sinsabor de que algunos operarios extienden el tiempo requerido con las palas de los cargadores a medio llenar, las vagonetas con la mitad de su capacidad y el paseo que le hacen al material antes de cargarlo, lo mismo las excavadoras en los cauces, que bailan las piedras de un lado para otro sin mucho sentido ingenieril.
Gustavo Elizondo Fallas, Santa María de Dota