Deuda educativa
Cambio generacional
Los problemas sociales nos están estallando en la cara. Tenemos toda una gama de ellos. Todos se deben a una educación que nunca planificó, enseñó ni constató el aprendizaje de los principios y valores democráticos y cristianos que supuestamente practicamos los costarricenses. Entonces, no hay que ser muy inteligente para comprender a los trabajadores premiados con pensiones de lujo, ni a las organizaciones sindicales, que al amparo del desorden administrativo y el populismo político, gozan hoy de privilegios especiales. Malo para un pueblo y, como siempre, bueno para unos pocos. Ellos y nosotros no aprendimos lo que es justicia social, solidaridad, sacrificio fraterno, etc. No se puede dar lo que no se ha recibido.
Es posible que con unos cuantos gobiernos justos, honestos y valientes, en unos 16 años los problemas de justicia laboral y pensiones pomposas queden solucionados. Pero en cambio, si comenzamos hoy con una educación que rescate y enseñe los principios y valores que por ley deben cumplirse, veremos resultados en cuatro o cinco generaciones.
Carlos Masís Acosta
Cartago
Destitución diplomática
Venezuela sigue siendo noticia. El embajador costarricense utilizó en sus declaraciones un recurso favorito de algunos políticos, que es llamar exageración de la prensa las denuncias en contra de los desmanes del régimen. La Cancillería decidió destituir al embajador por esas declaraciones, porque no están en línea con las opiniones del Gobierno, que quién sabe de qué será acusado ahora por las fuerzas “progresistas”.
En la OEA, la nueva directiva también está preocupada por Venezuela, y ve su participación como facilitador de un diálogo ordenado. Olvidó el nuevo secretario general que todos los intentos de diálogo fracasaron porque este régimen no quiere cambiar su rumbo y hace fracasar todos los intentos.
Julio Grooscors ( Cartas , 23/3/2015) plantea la urgencia de encontrar una solución, que no puede ser otra que una fuerte presión internacional para que el pueblo decida de manera transparente su voluntad, y que se garantice que esa voluntad sea respetada. De otra manera, lo único que se puede esperar es que la situación empeore.
Isidoro Zaidman Walzer
Venezolano residente
‘Call center’ de la Caja
Este año, la Caja cambió en algunas localidades el sistema de cita para control de los asegurados. Antes, en los carnés, las secretarias ponían la fecha de la próxima cita. Ahora hay que llamar a un call center para programar la cita, pero lo que la Caja no informó es que esa llamada tiene un valor de ¢900, y a veces hay que llamar dos, tres y hasta cuatro veces. Esto es un abuso para los asegurados. Hay que volver al sistema anterior.
Gerardo Navarro Moya
Cartago
Trenes llenos
Todos los días uso el servicio de tren entre Heredia y San José a las 7 a. m. Me llama mucho la atención la cantidad de gente que viaja de pie y hasta en las gradas. No sé si la solución al problema está en manos del Incofer o Transfeco, antes de que suceda una desgracia que lamentar. Lo más recomendable es que agreguen un vagón más o que haya servicio a las 6:45 a. m.
Marco Tulio Vindas Chaves
Heredia