Odio en Estados Unidos
Ciudadano dejó su país y se vino a Costa Rica
Hace 48 años llegué a Costa Rica como miembro del Cuerpo de Paz. En aquel tiempo los costarricenses me decían que los norteamericanos tenían buen corazón. Aunque me enamoré de Costa Rica, cuando mi trabajo se terminó regresé a mi patria. Ya me pensioné y vivo en Costa Rica de nuevo con mi esposa costarricense.
Hoy en día hay mucha intolerancia en mi país. Pero es más que intolerancia, es odio, odio propagado por mentiras en la prensa de la derecha. Es odio a los extranjeros, especialmente a los mexicanos, a la gente de color, a los musulmanes, a las mujeres y a la gente que no tiene la misma orientación sexual que tienen ellos. Es algo espantoso.
Mi esposa se enamoró de mi país, pero después de ver los incidentes de odio y matonismo en las noticias, tiene miedo de volver a Estados Unidos. Es un país que no reconocemos, lleno de gente “envenenada”. Para mí, Costa Rica sí es un país de buen corazón. Gracias por permitirme vivir en un país de libertad, tolerancia y respeto.
Steven David Johnson
San Rafael de Heredia
Crímenes en el país
Las corridas de toros, el tope y el carnaval de fin de año no nos dejaron ver las estadísticas publicadas en La Nación del 3 de enero. En el 2016 hubo 577 crímenes y el 1°. de enero murieron cuatro personas. Los costarricenses nos estamos acostumbrando a un país de alta criminalidad, donde “la cosa no es conmigo”, o “no exageren, este es un país pura vida, los malos vienen de afuera”. Nos olvidamos que así empezaron México, El Salvador, Colombia, Venezuela y otros países del área.
De pronto nos damos cuenta de que todos estamos afectados por la inseguridad. Daña más el crimen que el huracán Otto, porque la criminalidad es en todo el país.
Más policías y patrullas pareciera no ser la solución. Este debe ser un tema prioritario. La indiferencia no es buena consejera cuando las estadísticas del crimen nos rebasan.
Mario Valverde Montoya
Sabanilla de Montes de Oca
Dos Estados
Aunque siempre he tenido una gran admiración por el valiente pueblo judío y considero el Holocausto el peor de los crímenes de lesa humanidad, el editorial de La Nación (2/1/17) expone una realidad que no podemos tapar con un dedo, el pueblo palestino también merece una solución y lo constituye la creación de un Estado, que al igual que Israel pueda establecer fronteras seguras en el territorio que hace rato estableció la ONU y que, desgraciadamente, algunos dirigentes israelíes, en especial de extrema derecha como Netanyahu, han venido complicando con la creación de asentamientos dentro de estas fronteras.
Otra amenaza se cierne ahora desde el gran país del norte y es probable que a esto apuesten los dirigentes sionistas al rechazar ad portas la resolución contundente del Consejo de Seguridad de la ONU, pero deben entender que la comunidad internacional rechaza esta política expansionista.
Los estimables compatriotas de origen judío, pilares de la vida económica y política del país, deben entender que estar de acuerdo con la solución de los dos Estados no significa estar en contra del pueblo hebreo.
Gustavo Elizondo Fallas
Santa María de Dota
Trato en hospital
De parte de mi familia, quiero agradecer a todo el personal del Hospital Dr. Rafael Ángel Calderón Guardia que, de alguna forma u otra, brindó sus servicios a mi papá, Ricardo Naranjo, durante su internamiento el mes pasado. La mayoría de estas personas se comportaron de manera responsable, profesional y cortés. Muchas gracias.
Diego Naranjo Castillo
Desamparados