Aumento salarial
Sector público
Se han hecho varios comentarios sobre el decreto para el aumento salarial de los empleados públicos. Lo primero es que el Gobierno no se puede seguir endeudando con presupuestos irreales, y para nadie es un secreto que los empleados públicos reciben un salario mucho mayor en relación con el empleado de la empresa privada.
Me gustaría que algún periodista haga un trabajo de investigación sobre todas las irregularidades que se dan en instituciones autónomas, semiautónomas y entidades gubernamentales, por las famosas convenciones colectivas. Esta información es de interés público y la gente merece saber cómo se invierten los impuestos.
Cada vez que hay un aumento salarial, los dirigentes sindicales se cortan las venas e irresponsablemente llaman a paros y huelgas, pero ¿cuándo se han preocupado porque las entidades donde laboran sean más eficientes o que establezcansistemas de mejoramiento continuo?
Henry Martínez Gallo
San José
El INS responde
Don Gerardo Arias González ( La Nación, 04-03-2014) tiene razón en quejarse por el traslado del parqueo para clientes del edificio de las oficinas centrales, a uno ubicado más lejos del INS. Lo que sucedió fue que en la licitación que se hizo no participaron los parqueos más cercanos. Respecto a la propiedad que se compró, actualmente se está utilizando para parquear vehículos del INS pero se habilitará un espacio para los clientes.
Guillermo Constenla
Presidente Ejecutivo, INS
Arreglo del Incofer
Gracias, señor Carabaguiaz por su pronta respuesta a la inquietud de una abuela asustada. Ya arreglaron los bordes de la línea férrea 300 norte del Walmart de Curridabat. Lamentablemente, dejaron el centro de los rieles en tierra, y lo señalo para ver si lo pueden asfaltar pues está hundido y podrían hacerse, de nuevo, los huecos. Pero, el arreglo ha hecho una enorme diferencia al pasar por ahí. Bendiciones.
Jeannette Abdelnour
Curridabat
Cliente perdido
El 21 de febrero, después de realizar las compras quincenales en Maxi Palí de Nicoya observé que a mi carro le habían robado un accesorio de los rieles. Inmediatamente, solicité al gerente y al encargado de vigilancia observar la grabación de las cámaras para descartar que el daño hubiese sido en el parqueo del supermercado, pero se negaron a mostrármela.
Con esta actitud, perdieron a un cliente que hacía compras por ¢2.5 millones al año en su negocio.
Didier Fajardo Rosales
Nicoya
Direcciones a la tica
Vamos a votar por el candidato que nos asegure que cada casa o negocio del país va a tener una dirección exacta. Costa Rica tiene que dejar el siglo XVIII y vivir en el siglo XXI si quiere progresar. La ineficiencia de la falta de un sistema de direcciones es increíble y el costo tiene que ser muy alto. No todo el mundo anda con un GPS.
Richard y Jean Redmond
Moravia
Ebáis sin mejoras
Con tanto cambio en los Ebáis de Curridabat yo siento que el servicio, en vez de mejorar, empeoró: hay doctores que ni siquiera revisan al paciente, no tienen respuesta de laboratorio para hacer exámenes cuando muchas personas necesitan un seguimiento mes a mes; han quitado a mucho personal que sí valoraba al paciente, como doña Xinia Benavides, de la farmacia. Los pacientes estamos interesados en que la Unibe nos devuelva a quienes nos atienden bien. No fue un buen cambio, porque no hay mejoras de nada.
Nathalia Barahona Amador
Curridabat
Unidos por Venezuela
La situación caótica que vive Venezuela es consecuencia de una mala administración pública, no me explico cómo un país con grandes yacimientos de petróleo tenga al pueblo en esa pobreza. Y lo que del todo no entiendo, es que sea el mismo pueblo el responsable de esta situación pues tuvieron la oportunidad para elegir a su mandatario democráticamente.
Hoy debemos orar y pedir a Dios que dé a los hermanos venezolanos la fortaleza, la sabiduría y la entereza para que puedan superar estos momentos difíciles.
Bernald Herrera Chacon
Tibás
‘Gracias, Magally’
Me gustaría que reprodujeran el artículo “Gracias, Magaly”, que un médico publicó hace unos 25 o 30 años, en La Nación de entonces. Él relataba la historia de una parturienta de 19 años; en la camilla del parto, el médico le advirtió a la joven que solo podría salvarse uno de los dos: ella o el niño. Le preguntó qué prefería. Ella le contestó: “Quiero a mi hijo”. Nació el bebé, y ella murió de la mano del galeno.
Galo Guerra Cobo
San José