El pueblo ficticio Banshee, en el estado de Pennsylvania, Estados Unidos, vivirá una pura conmoción a partir de la llegada de un inmigrante anónimo que escapa de un pasado oscuro y que, mediante la conveniencia de no revelar su identidad, logrará salirse con la suya aunque sea durante algunos episodios de la primera temporada.
Banshee es una de las primeras series de Cinemax, el canal de cable operado por Home Box Office (HBO) que comenzó a producir contenido propio tras el éxito de algunas de las series y producciones de su casa matriz. Hasta la fecha, se trata también del show original de Cinemax más popular.
Estrenado en enero del 2013, el programa llegará a la señal latinoamericana de Cinemax más de dos años después, mediante el estreno de su segunda temporada (en Estados Unidos recién terminó de transmitirse la tercera temporada), pactado para esta semana: el viernes 1.° de mayo, a las 10 p. m.
Nadando en los géneros del drama y la acción, el show televisivo tuvo una primera temporada de diez episodios, en los que se esclarecen algunos pero no todos los detalles acerca de la situación que llevó al personaje principal anónimo a arribar a un lugar tan desolado y extraño como Banshee.
De él no conocemos nunca su nombre real, pero sí sus intenciones: el protagonista (interpretado por el actor Anthony Starr, conocido por el programa neozelandés de drama Outrageous Fortune ) pasó 15 años en prisión por robar diamantes valorados en $10 millones de su pasado jefe, un capo de la mafia llamado Rabbit, quien no olvida el crimen del personaje y quiere vengarlo tras su salida de la cárcel.
Por eso mismo es que el protagonista se muda a Banshee, aunque también porque tiene metido entre ceja y ceja que Anastasia, su expareja y cómplice del crimen que lo mantuvo década y media detrás de las rejas, vive en ese pueblo. Tiene la intención de reencontrarse con ella, sin saber que ella ahora asume la identidad de Carrie Hopewell (interpretada por la actriz Ivana Milicevic) y está casada, con dos hijos.
Por su lado, el incógnito llega al pueblo e inmediatamente asume la identidad del policía Lucas Hood y se convierte en el alguacil de Banshee, así no más. No obstante, acostumbrarse a esta identidad y tener que lidiar con la familia del verdadero Lucas Hood representará un reto para el protagonista.
Por si fuera poco, al recién convertido en policía le tocará lidiar con la maquinaria del crimen llamada Kai Proctor, una de las razones por las que el sueño no es posible en la fuerza policial del pueblo. Adicionalmente, el falso Hood toma protagonismo en la bandada gracias a su estilo poco protocolario y rebelde de ejercer el poder de la ley.
Sin embargo, su mayor preocupación será reencontrarse con su amada y evitar que Rabbit dé con su paradero, sin tomar en cuenta el combo de problemas que se avecinan a la vuelta de la esquina. Como típica serie de acción, la trama de Banshee está empapada de sangre, violencia, sexo y conflictos en lapsos que se mueven muy rápido.
Sea como sea, lo que prueba el personaje al entrometerse en todo esto es que pudo cumplir lo que quiso cuando salió de prisión: alejarse y comenzar una nueva vida. La interrogante es hasta cuándo logrará mantenerla sin que los fantasmas de su pasado le hagan un macabro guiño y toquen la puerta.
La opinión de la crítica.
“ Banshee tiene la audacia de comportarse como si su violencia sangrienta, configuración inverosímil y fealdad estudiada fuera de alguna manera la televisión de vanguardia. Pero de hecho, sólo es más de lo mismo”, escribió el crítico del Washington Post en un artículo publicado en el 2013, cuando la serie empezaba a rotar en televisión.
No obstante, no todos fueron tan negativos con su recepción de la primera temporada de la serie: la crítica de Los Angeles Times manifestó: “ Banshee tiene elementos de Justified , Big Love , True Blood y la película Witness . Lo que no tiene, al menos en sus primeros dos episodios, es algo nuevo que decir; es acerca de pequeños pueblos, poder, corrupción, miedo, crimen o amor”.
Por su parte, Rob Brunner de Entertainment Weekly fue todavía más efusivo con respecto. El crítico comentó que a pesar del ambiente un tanto tenso y de la historia medio jalada del pelo, la serie es una patada ultraviolenta y exagerada, lo que a su parecer la convierte en “perversamente divertida”.