Este es un programa de fetishismo y aventura. El primero viene en la forma de objetos antiguos que encierran poderes maravillosos; la segunda llega en las vivencias del bibliotecario Flynn Carsen y algunos aspirantes a trabajar con él, con quienes deberá recuperar aquellas antigüedades y evitar que caigan en las manos equivocadas.
El mundo de The Librarians ( Los bibliotecarios ) se empezó a dibujar en el 2004 con una película para televisión en la que Carsen (Noah Wyle) obtiene el trabajo como custodio de una colección secreta que se esconde bajo la Biblioteca Metropolitana Pública de Nueva York.
Aquel filme tuvo el nombre de The Librarian: Quest for the Spear ( La búsqueda de la lanza ), y a ella la siguieron Return to King’s Salomon Mines (El regreso a las minas del rey Salomón), en el 2006, y Curse of the Judas Chalice (La maldición del cáliz de Judas), en el 2008.
La diferencia con la nueva serie es que –contra sus deseos– el erudito, valiente, pero no tan hábil bibliotecario deberá trabajar con un equipo. El fichaje más notorio será Eve Baird, una exagente antiterrorista para la OTAN (Rebecca Romijn), a quien se la contrata para cuidarle las espaldas al bibliotecario principal.
La serie se decantará en una acción al estilo Indiana Jones, mezclada con una intriga cercana a El código Da Vinci .
Magia contra ciencia. En la nueva aventura seriada, los bibliotecarios se enfrentarán a la Hermandad de la Serpiente: una organización que amenaza con destruir la tecnología y regresar a una época en la que prime la magia.
En el primer episodio, esta sociedad secreta se hace evidente cuando intenta asesinar a varios de los aspirantes a bibliotecarios en el acopio secreto.
El primer reto Flynn Carsen será rescatar a los tres supervivientes, quienes se unirán a su equipo: Cassandra Cillian (Lindy Booth), una asistente hospitalaria aquejada con un tumor maligno que le da cualidades mentales extraordinarias; Jacob Stone (Christian Kane), un vaquero con una vida secreta de académico; y Ezekiel Jones (John Kim), un extraordinario ladrón en crímenes de talla internacional, con un talento especial para las incursiones peligrosas y las escapadas.
El reto del nuevo equipo será impedir que la Hermandad de la Serpiente se apodere de la corona del mítico rey Arturo, una joya que confiere el control sobre cualquier otro objeto mágico.
Esta primera temporada de The Librarians tiene diez episodios y se está estrenando, más o menos, al mismo tiempo en Estados Unidos y en América Latina. La serie viene respaldada por el productor Dean Devlin, quien fue coguionista y productor de Stargate , Godzilla e Independence Day .
A Noah Wyle, quien interpreta al bibliotecario, se lo conoció primero como un joven –y después experimentado– médico en ER . Luego participó en la serie de ciencia ficción Falling Skies . No obstante, Wyle ha afirmado que su personaje favorito en televisión es justamente el de Flynn Carsen. Aunque será central en los primeros episodios y seguirá siendo un personaje habitual, Wyle le cederá el protagonismo a los nuevos bibliotecarios conforme avance la serie.
La crítica de Los Angeles Times , Mary McNamara, alabó el programa y afirmó que, aunque no cambiará el panorama de la televisión, al menos lo hará un poco más divertido.
The Librarians , dice la crítica, recuerda aquellos tiempos en la televisión “cuando los héroes eran héroes, las escenas de peleas estaban claramente coreografiadas y nadie terminaba destripado delante o detrás de las cámaras”.
Varios sitios emparentan la premisa de la serie con la de Warehouse 13 , la recientemente difunta serie de SyFy, en la cual un par de agentes del Servicio Secreto estadounidense debían proteger una bodega con las más extrañas reliquias que hubieran llegado a manos del Gobierno de aquel país. Una reseña del sitio io9 afirma que The Librarians llenará el hueco en el corazón que dejó la desaparición de esta otra serie.
Para quienes quisiéramos ser todavía más memoriosos, The Librarians también recuerda la serie Viernes 13 (1987), la cual quiso capitalizar descaradamente el nombre de la famosa franquicia fílmica en un programa que nada tenía que ver con Jason y sus asesinatos.
En aquella serie, una joven hereda la tienda de antigüedades de su tío, y vende todo el inventario en un remate. Posteriormente se entera de que todas las antigüedades están malditas y los episodios subsiguientes son la crónica de la recuperación, pieza a pieza.
Como se ve, la nueva serie tiene antecedentes con lugares comunes; sin embargo, la crítica destaca que la serie entrega lo que promete: diversión.