Un atormentado abogado no vidente, una detective alcohólica, un exconvicto con pasado violento y un joven millonario. La unión de cuatro personajes de este tipo resulta suficiente para nutrir una historia interesante, aún antes de agregar superpoderes, ninjas, resurrecciones y explicaciones mágicas a la receta.
En el 2013, cuando se anunció que Netflix había llegado a un acuerdo con Marvel para desarrollar series de televisión basadas en algunos de los personajes de la editorial, lejos estábamos de imaginarnos el cuadro completo. Desde entonces, la crítica y los consumidores han coincidido en aplaudir de buena gana las series Daredevil , Jessica Jones y Luke Cage , así como aburrirse de lo lindo con la deplorable Iron Fist (ni modo, no se podía esperar siempre cartón lleno). A las puertas de completar el primer ciclo de la cooperación entre los dos gigantes, ¿qué mejor que hacer un arroz cantonés con ingredientes tomados de todas las propuestas?
The Defenders es la culminación prometida: una miniserie de ocho episodios que junta en una misma historia a los cuatro héroes de las series de Marvel y a la mayoría de personajes secundarios que los han acompañado. Un mal mayor, más grande que todos ellos, requerirá que este disfuncional colectivo funcione y jale parejo.
Historias de barrio. Netflix supo encontrarle el tono correcto a los personajes que Marvel puso a su alcance. Si bien todo esto se desarrolla dentro del mismo universo temático, que incluye las grandilocuentes películas de Marvel Studios, acá no hay extraterrestres, dioses nórdicos ni urbes convertidas en ruinas, pues el tono es más íntimo, citadino y tan “aterrizado” como los cuentos de superhéroes lo permiten.
Las cuatro series Marvel que ya vimos en Netflix se desarrollan en distintos puntos de Nueva York, donde los protagonistas enfrentan amenazas más “reales”, salidas del crimen organizado y las grandes corporaciones: Matt Murdock/Daredevil es el vengador de Hell’s Kitchen, Jessica Jones ronda el mismo vecindario, Luke Cage es el defensor de Harlem y Danny Rand/Iron Fist se mueve entre los sectores ricos de Manhattan.
A manera de breve repaso, esto es lo que ya vimos: Matt Murdock es un abogado no vidente que, ante las limitaciones del sistema legal, toma en las noches la justicia en sus manos como el vigilante Daredevil. Jessica Jones es una atormentada detective privada con problemas de alcoholismo, dotada de la habilidad de saltar muy alto y fuerza sobrehumana; Luke Cage es un exconvicto provisto, mediante experimentos ilícitos, de una piel indestructible, y Danny Rand es el inmaduro heredero de un imperio empresarial , quien vuelve a la palestra tras 15 años desaparecido, tiempo en el que se entrenó con monjes budistas y se convirtió en el mítico guerrero de artes marciales conocido como el Iron Fist.
El estar en el marco de Netflix ha permitido a los productores de sus series el mantenerse fieles a las temáticas de los cómics, y abordar discusiones adultas que Marvel no puede desarrollar a fondo en sus películas para todo público. Así en Daredevil vimos al héroe en conflicto entre sus acciones de guardián y sus culpas católicas; Jessica Jones lidió con alcoholismo, abuso sexual y estrés postraumático; Luke Cage abordó la discriminación en las comunidades afroamericanas, y Iron Fist ..., bueno, olvidémonos de Iron Fist .
El poder de cuatro. Es inevitable el caer en la comparación entre Los Vengadores y Los Defensores : la primera fue la culminación de la fase inicial del Universo Cinematográfico Marvel y puso en una misma historia todos los personajes de la franquicia que pasaron previamente por la gran pantalla, mientras que la segunda viene a ser lo mismo para el esfuerzo compartido Marvel-Netflix.
Hasta el estreno de la miniserie, el viernes 18 de agosto, solo Jessica Jones y Luke Cage están consientes de la existencia del otro (es una historia larga que incluye varias escenas de cama y la revelación de que Jones fue quien mató –contra su voluntad– a la esposa de Cage). No obstante, los cuatro héroes llegan a The Defenders por su cuenta y es previsible que la desconfianza sea la tónica, al menos en los primeros contactos.
La última vez que vimos a Matt Murdock (Charlie Cox), el abogado tocó fondo, tras la muerte de su amiga de infancia/amante/asociada Elektra Natchios (Élodie Yung), y la disolución de su firma legal. Por su parte, Jessica Jones (Krysten Ritter) empieza a disfrutar los buenos tiempos de su agencia de investigación, tras sobrevivir al traumático enfrentamiento con su torturador Kilgrave (David Tennant).
Luke Cage (Mike Colter) terminó su serie de vuelta en la cárcel, luego de entregarse voluntariamente a las autoridades para limpiar su nombre, y Danny Rand (Finn Jones) logró detener parte del plan que la organización criminal La Mano tiene para apoderarse de Nueva York.
El cuarteto tomará forma para enfrentar a una adversaria nueva en sus tramas: Alexandra, interpretada por la veterana e irrepetible Sigourney Weaver. Lo que se sabe de su personaje es que es la peligrosa líder de una poderosa red delictiva y activa participante de las fuerzas oscuras que mueven los hilos de la Gran Manzana. A lo anterior se le debe sumar, además, el control que ejerce sobre una resucitada y amnésica Elektra.
Junto con los cuatro protagonistas, la miniserie trae de vuelta a muchos de los personajes secundarios de sus respectivos títulos: de Daredevil veremos a la intrépida secretaria/reportera/asistente legal Karen Page (Deborah Ann Woll); al sufrido exsocio legal de Matt, Foggy Nelson (Elden Henson); al confesor del héroe, el padre Lantom (Peter McRobbie), y al enigmático mentor de Matt y Elektra, Stick (Scott Glenn).
De Jessica Jones , la miniserie muestra a la hermana adoptiva de Jessica, la periodista Trish Walker (Rachael Taylor), y a su vecino Malcolm Ducasse (Eka Darville). Por Luke Cage , la convocada es la detective Misty Knight (Simone Missick) y, de Iron Fist , se retoma a la guerrera compañera sentimental de Danny, Colleen Wing (Jessica Henwick), y al líder local de La Mano, Bakuto (Ramón Rodríguez).
A todo este revoltijo de personajes hay que agregar la aparición de tres mujeres que ya han saltado entre las distintas series: la incansable enfermera Claire Temple (Rosario Dawson), la abogada Jeri Hogarth (Carrie-Anne Moss), y la enigmática Madame Gao (Wai Ching Ho). Y, como cereza del pastel, la ya confirmada participación de Frank Castle/The Punisher (Jon Bernthal), violento vigilante cuya tremenda presencia en la segunda temporada de Daredevil le valió ganarse su propia serie en Netflix.