Artes marciales, intriga política, campos de batalla, recorridos ecuestres y experiencias sexuales. Todo está en Marco Polo , cuyas aventuras en Oriente en el siglo XXIII llegan a Occidente en una serie original de Netflix.
Se trata de las travesías del viajero y mercader veneciano durante el imperio mongol de Kublai Khan, un gobernador calculador, codicioso, vengativo y fácilmente intimidante.
Con una inversión de $90 millones para financiar la primera temporada, la megaproducción se aseguró la recreación de complejas escenografías de palacios, recámaras para un harem de hermosas sirvientas, un enorme calabozo y un salón para practicar peleas.
La trama también implicó la dramatización de ejércitos de centenares de combatientes y la fabricación de indumentarias y armaduras de antaño, detalles que –inevitablemente– han generado la comparación de esta serie con la exitosa Game of Thrones , de HBO.
“Los relatos en Los viajes de Marco Polo se escribieron siglos antes que la novela de George R. R. Martin”, se defiende en una entrevista a la BBC John Fusco, creador de la serie filmada en Malasia y Kazajistán.
Para Fusco la cultura china es vieja conocida y cuando hizo un viaje a Mongolia en el 2007 encontró a Marco Polo en referencias por doquier y así, en dos instantes, se decidió por comenzar su propia travesía fílmica.
El joven Marco Polo es entregado por su padre a Khan casi como una ofrenda, se presenta como un tipo tímido e inocente que se gana el favor del emperador por ser particularmente observador. Así se convierte en sirviente en el palacio durante dos décadas, tiempo en el que aprende todo lo necesario para convertirse en guerrero y héroe.
El protagonista de la serie es personificado por el italiano Lorenzo Richelmy.
Antes de participar en la megaproducción, el actor de 24 años era un total desconocido fuera de su tierra natal. De hecho, para interpretar a su coterráneo, Richelmy debió aprender inglés, se expuso a un entrenamiento físico exhaustivo, aprendió a pelear kung fu, manejar espadas, cabalgar y hasta a lidiar con las escenas de contenido sexual. Como ya dijimos: de todo eso tiene Marco Polo .
El elenco está integrado principalmente por histriones asiáticos aunque también aparece el británico Benedict Wong, quien interpreta al temido Khan.
La primera temporada de la nueva serie de Netflix resume los primeros cinco años del viajero italiano en la corte de Kublai Khan, quien además fue el primer emperador chino de la Dinastía Yuan.
¿Existe precisión histórica en esta serie? Hay quienes dudan de la exactitud de los relatos de Marco Polo en sus textos por lo tanto, si hubiere imprecisiones, dicen algunos críticos, el error podría ser más bien de Marco Polo y no de Marco Polo . ¿Entienden?
Atrevida expansión
Tras presentar producciones como Orange is the New Black y House of Cards , Netflix apostó por lanzarse a una serie ambiciosa, que se remonta más o menos al año 1275, lo que implicaba un costo mucho mayor que cualquier otro proyecto al que se hubieran aventurado antes.
Algunas críticas han calificado Marco Polo como sosa, desmotivadora, inerte y carente de emociones. A la vez, se ha comprendido que es un lanzamiento estratégico al tocar una historia de interés universal, lo cual amplía el público meta de la serie.
Los 10 capítulos de la primera entrega están disponibles únicamente en el sitio de Netflix. Todavía no hay fecha prevista para que Marco Polo, el de la serie, retome sus andanzas en Asia.