Parco, siempre viendo de medio lado, con una sonrisa de sarcasmo apenas sugerida. Él sabe más que todos nosotros, siempre, y sabe que nosotros lo sabemos. Es un patán, aún en las situaciones más sentimentales, y nos odiamos porque, haga lo que haga, nos cae bien. Es Bruce Willis.
60 años, 60 películas, una única expresión. Willis es el señor Hollywood por excelencia, el rudo-vulnerable que por lo general se sale con la suya. No es cuento: sus películas malas se cuentan por decenas y ahí anda, tranquilo, sin perder su halo de estrella.
Está claro que para hablar de lo mejor de su filmografía es necesario referirse a títulos como Pulp Fiction ; 12 monos , El quinto elemento , El sexto sentido y Sin City . Tampoco se discute que Bruce siempre será asociado con la franquicia que lo convirtió en ícono universal del género de los balazos y manazos: Duro de matar .
Sin embargo, por ahí quedan otras películas muy suyas, de esas que uno no extraña en particular, pero que cuesta dejarlas de ver cuando uno se las topa por accidente. Y es a esas obras olvidadas que estará dedicado este sábado 8 de agosto.
El canal TCM transmitirá ese día el especial Locos por Willis , abarcando cinco películas estelarizadas por el más rudo de los calvos.
La jornada empezará suave, a las 3:50 p. m., con la comedia de Disney The Kid , del 2000. Ahí, Bruce interpreta a un exitoso y amargado ejecutivo cuya soledad se ve alterada al encontrarse con un niño muy similar a él; demasiado similar a él.
La segunda película de la tarde (4:55 p. m.) es la mejor de la selección. Se trata de Unbreakable , también del 2000. En su segunda colaboración con el director M. Night Shyamalan, Willis da en este drama una de las actuaciones más memorables de su carrera, al encarnar a un oficial de seguridad que descubre, en una tragedia ferroviaria, que es indestructible.
A las 7 p. m. se emitirá Last Man Standing , de 1996. Inspirada en Yojimbo , de Akira Kurosawa, la película se desarrolla en un polvoriento pueblo fronterizo cuyo control se disputan dos bandas mafiosas. Willis es John Smith, un tipo duro que pasa por casualidad y que media, a su manera, entre las pandillas.
La cuarta cinta del especial es de 1997. En El Chacal , Willis se viste de villano, como un frío terrorista internacional contratado para consumar un magnicidio, mientras Richard Gere y Sidney Poitier corren para atraparlo.
Si los ojos aún le dan para el cierre, la última película se dará ya en domingo, a la 1:25 a. m. Se trata de la comedia Mira quién habla (1989), en la que Bruce presta su voz a un bebé... que no se diga que el tipo no es versátil.