La vibración de los instrumentos de percusión se conjugará perfectamente con el movimiento en el espectáculo
Las obras coreográficas fueron inspiradas en las obras musicales
También el Ensamble de Percusión Costa Rica UNED tendrá la oportunidad de lucirse en solitario con la interpretación del
Esta última composición será interpretada por Alejandro Molina, Ricardo Alvarado y Bismarck Fernández, director del ensamble.
En el caso de Rogelio López, él creó las coreografías de la
Según López, no quiso contar una historia o analizar un tema en específico en su caso, sino que su objetivo fue desarrollar obras donde pudiera explotar el placer de bailar, pues la música está llena de momentos dramáticos y de gran fuerza.
De esta manera, en la
Sus intérpretes realizan cada movimiento como si fuera una evolución: al inicio de la coreografía, cada giro, cada extensión de brazos y piernas se realiza lentamente, hasta desembocar en pasos cargados de energía, que llenan de fuerza el final de la coreografía.
Para López, este trabajo viene acompañado con un mar de recuerdos, pues, en los inicios de su carrera, cuando fue maestro en el Conservatorio Castella, hizo un montaje con esta misma obra musical. Sin embargo, se apresuró a aclarar que entre aquella obra coreográfica y la actual no hay ningún parecido.
A diferencia de la
Además del baile, esta pieza se ve enriquecida por un vestuario compuesto por vaporosas faldas blancas, que embellecen cada uno de los pasos de la obra.
“Esta danza es como una limpia; es como entrar en trance para poder sacudir nuestro mundo interno en relación con el externo. Esta es una obra inspirada en los rituales de los principios de la humanidad, a los que la cultura debe acercarse actualmente”, comentó López.
Al igual que López, Luis Piedra aprovechó la oportunidad de poder presentar su trabajo al lado de un ensamble de percusión.
El gran objetivo en su caso fue desarrollar coreografías “muy sensoriales”; es decir, en las que los cuerpos pudieran moverse de acuerdo a lo que les dictará la música.
En
“La primera pieza (...) es como un juego de hilos y puntos donde los bailarines se meten por un lado y aparecen por otro. En el caso de la segunda obra, que en español se llama
Esta iniciativa terminó por desencadenar una serie de coincidencias, pues, cuando le contó , Piedra tenía en mente crear un grupo independiente al lado de López.
Ante la propuesta, ambos coreógrafos aceptaron de inmediato, ya que la iniciativa les permitiría hacer su debut acompañados de música en vivo, algo que le da mayor belleza a las obras, y en un escenario como el Teatro Nacional.
“Esta conjunción ha sido maravillosa; esta es una manera increíble de comenzar, porque la danza se multiplica con música en vivo, sobre todo con un ensamble de percusión, que es capaz de meter la música en la sangre y en cada poro”, aseguró Luis Piedra.
Al igual que los creadores, los músicos también se sienten satisfechos con el resultado obtenido y auguran un éxito en escena.
“Hemos hecho una muy buena combinación los músicos del ensamble nos sentimos muy bien, creo que el espectáculo será fluido y las coreografías serán fantásticas”, manifestó Fernández.