10 de mayo del 2012, Compaia Nacional de Teatro y la Compaia Nacional de Danza presenta en el teatro de la Aduana, presenta la obra Concheras Te acordas de aquellas fiestas? expectaculo basado en textos de Aquileo J Echeverria/ caravaca (Marvin Caravaca)
El 2012 está por llegar a su final y lo hace dejando al país un año donde la producción ofreció cerca de 70 estrenos, lo que refleja una actividad constante, principalmente en el sector independiente, al igual que en el estatal.
No obstante, es necesario agregar que fue un año sin obras que sorprendieran o maravillaran al público. Incluso, según Andrés Sáenz , crítico de Teatro de La Nación , hay espectáculos que merecen el título de “peor del año”.
Nombrar todas las obras sería difícil; sin embargo, hay títulos que vale la pena repasar como Las heridas del viento , de Tik Tak Producciones; Maldito Murphy , de Yicrá; Concherías , coproducción de las compañías Nacional de Teatro y Danza y La razón blindada , de La Maga Teatro.
De los integrantes de Sotavento y su trabajo se aprende que hay que decir las cosas, aunque algunos se molesten. De todas formas, van a hablar. Por eso pese a que se estrenó casi 1.2 obras por semana en promedio, ese dato estadístico no es sinónimo de calidad en las tablas.
Sorpresas. Javier Monge , presidente de la Asociación de Grupos Independientes de Teatro Profesional (Agitep), comentó que tener muchas producciones, incluso más que algunos años anteriores, no es sinónimo de buena calidad. Eso sí, aclaró que tampoco comparte esa visión de que fue mejor lo que se hizo en las décadas de 1970 y 1980, que, en ocasiones, se mencionan como la “época dorada del teatro nacional”.
Para David Vargas, profesor de Apreciación Teatral en la Universidad de Costa Rica, es necesario acudir a calificativos como “deplorable situación teatral”.
Con un aire más optimista se mostraron el director Manuel Ruiz y el actor Tobías Ovares. Para Ruiz, fue un buen año, con enorme cantidad de actividad en el sector independiente; con propuestas que calificó de tradicionales, hasta otras que llamó experimentales, como ¡Que roja está la luna! .
Por su parte, Ovares considera que hablar de lo positivo o negativo en teatro no es lo que aplica. En su lugar prefiere ver hechos cuantificables. Por eso resaltó que hay agrupaciones de teatro que se sostienen en el tiempo, y siguen con propuestas interesantes.
Además, Ovares resaltó que aún hay propuestas que sorprenden, como le ocurrió con Manuales de (in) seguridad, del grupo Oshún.
El crítico Sáenz aseguró que de la producción que tuvo oportunidad de ver en el 2012 fue Concherías , la puesta que le hizo creer que todavía es posible hacer teatro de elevado contenido artístico y dramático en el país.
De igual forma Sáenz aseveró que al pensar en la peor obra que tuvo oportunidad de ver en el 2012, le fue imposible escoger entre El cuarto de Verónica , de Terruño Espressivo; Pentadrama , producción del Teatro Nacional, y ¡Qué roja está la luna! , del Teatro Universitario. Por eso, les entregaría de forma tripartita ese galardón.
Movido. Apartándose de la calidad del teatro, el 2012 también fue un año con otros logros que destacar. Aparecieron tres nuevas salas, todas en zonas donde no existían teatros.
Ese fue el caso del Teatro Espressivo, en Pinares de Curridabat; el Teatro Flor Urbina, en Guadalupe, Goicoechea, y el Teatro Avellana, en Heredia.
El país tuvo oportunidad de disfrutar de producciones extranjeras, gracias al Festival Internacional de las Artes.
Fuera de las fronteras, el teatro tico también tuvo actividad.
La Compañía Nacional de Teatro (CNT) se presentó en Brasil, Nicaragua y República Dominicana. Fue el montaje Concherías , la obra de mayor proyección de la compañía estatal, con cerca de 12.600 espectadores a lo largo del año.
Ese alcance del montaje dirigido por Luis Rábago hizo que Gladys Alzate afirmara que la CNT tuvo un año con logros significativos y una amplia cobertura de públicos.
El teatro sufrió este año la pérdida del director Jean Moulaert , fundador del Teatro Arlequín. Él murió el 29 de julio.
Otro hecho que no puede pasar inadvertido es el firme paso sobre las tablas del montaje Dos arriba y una abajo ; que este 2012 llegó a su octavo año en cartelera sin interrupciones, acumulando casi 1.300 funciones.