La aventura y periplo del capitán Nemo a bordo del submarino Nautilus, llegará el domingo a su final, cuando concluya la temporada de la obra
La obra, primera producción centralizada del año de la compañía estatal, es una adaptación de la novela del mismo nombre, del francés Julio Verne. Se presenta en el Teatro de La Aduana, y está dirigida a un público familiar, por eso se presenta en las tardes.
En los cerca de 60 minutos de espectáculo, los niños y sus padres descubrirán una aventura maravillosa, encabezada por el profesor Aronnax (Bernardo Barquero), un aventurero de los océanos.
En un viaje en busca de un supuesto monstruo marino, acompañado de su amigo Consejo (Jonnie Obando), aparece el supuesto monstruo. Para sorpresa de ellos, el susodicho animal, que destruye barcos y aterroriza hasta los marineros más valientes, resulta ser el submarino Nautilus, comandado por el capitán Nemo (Winston W. Cummings).
Aronnax, Consejo como el arponero canadiense Ned Land (José Montero) se convierten en prisioneros del Nautilus, aunque en realidad gozan de gran libertad, con la única condición de permanecer indefinidamente en la embarcación.
Según Nina Reglero, directora de la obra, los espectadores encontrarán en esta trama un mensaje relacionado a conceptos de justicia, mientras descubren las riquezas que el mar ofrece.
Pero lograr que los menores encuentren temas para reflexionar es una tarea que se logra acompañada de otros elementos, como hacer que los pequeños primero se la pasen muy bien en el espectáculo.
El fin de la temporada no marcará el final de la obra, porque la CNT espera llevarla de gira por distintas comunidades. También buscarán ofrecer este año una segunda temporada; ambas actividades quedarán para setiembre.