Sarah Palin fue desde el 2006 hasta el 2009 gobernadora en Alaska, y en el 2008, el senador estadounidense John McCain la convocó como su futura vicepresidenta. Pero Palin no llegó al mundo de la política por coincidencia.
Nació en Idaho pero cuando era una bebé su familia se mudó a Alaska, a la última frontera. La más pálida y fría de todas. Un lugar que se rige por la Estrella Polar. Su papá era maestro de ciencias y su mamá una secretaria.
En el anuario de su escuela la futura candidata a gobernadora citó una frase de la Biblia, firmó la página de la clase como: “Sarah Heath #22”, y escribió que le gustaría sentarse en una cabina de transmisión con Howard Cosell, legendario periodista deportivo, a narrar los partidos de baloncesto que jugaba su novio Todd Palin.
Una vez afuera de esas aulas entró en 1987 a la Universidad de Idaho para estudiar periodismo y ciencias políticas. En su tiempo libre competía en concursos de belleza y en 1984 fue elegida como Señorita Wasilla (un condado en Alaska), donde ganó el título de Miss Simpatía.
Fueron esos escenarios los que de una forma u otra moldearon su capacidad para hablar en público y para vender una imagen sin importar el contenido.
En 1988 Sarah y Todd entraron a los Tribunales de Justicia de Alaska donde se casaron sin decirle a sus padres. Sus testigos fueron dos señores jubilados que estaban cerca, según una biografía no autorizada escrita por Frank Bailey.
Palin comenzó a trabajar como comentarista deportiva en televisión pero solo medio tiempo, el resto del día cuidaba de sus hijos.
Su novio trabajaba con la compañía de petróleo British Petroleum, y se dedicaba a la pesca de salmón. También competía en la carrera más larga en snowmobile de Alaska llamada Iron Dog. Una en la que los competidores se ponen masking tape en la cara para protegerse de las bajas temperaturas.
En 1996, Sarah era una ciudadana políticamente activa, ya había trabajado en la alcaldía de Alaska apoyando un proyecto de impuesto sobre ventas. En el 2002, se lanzó para el puesto de vicegobernadora de Alaska, pero su oponente Loren Leman, ganó. Después de la derrota, trabajó tres años como supervisora de ética para la Comisión de Petróleo y Gas de Alaska. En el 2006 volvió a postularse y esta vez ganó las elecciones primarias para gobernadora con la promesa de mejorar la educación, el transporte y la seguridad. Palin se convirtió en la primera mujer en ser Gobernadora de Alaska y la más joven con 42 años.
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Si usted escribe Sarah Palin en Youtube saldrán videos con estas descripciones: ‘La peor respuesta’. ‘La más tonta’. ‘Greatest Hits’. ‘La entrevista más vergonzosa’.
El 29 de agosto de 2008 Palin, abanderada del ultraconservador Tea Party, de 48 años y madre de cinco, anunció que sería la primera mujer candidata a la Vicepresidencia de Estados Unidos por el Partido Republicano acompañando a John McCain. (El Tea Party es un movimiento político de ideología de derecha extrema).
A partir de ese anuncio se empezó a cuestionar si Palin tenía las aptitudes necesarias. Una vez en el ojo público, la candidata debía responder preguntas complejas relacionadas a Irak, a la doctrina de George W. Bush sobre impuestos, pobreza, inmigrantes. Pero casi siempre fallaba. Para los conservadores ella era inteligente, patriota, temerosa de Dios; y para los liberales era estúpida, ignorante, oportunista, y sobretodo muy peligrosa.
Pero Palin era un rostro nuevo, los republicanos tenían ocho años de estar bajo el gobierno de George Bush hijo. Además, ella aboga por la libertad en el uso de armas, por la enseñanza del cristiano en las escuelas, por la penalización del aborto y por la pena de muerte.
El 1 de septiembre de 2008, Palin reconoció que su hija de 17 años estaba embarazada, pero aclaró que ella iba a casarse con el padre de su futuro hijo. Poco después se supo que la gobernadora estaba siendo objeto de una investigación en su Estado por posible abuso de poder al presionar a su excuñado a cesar en su cargo en la Administración de Alaska.
A pesar de que su talón de Aquiles fueron las entrevistas, Miss Simpatía fue capaz de encantar con un discurso idealista a un público hambriento que se tragó frases bien pronunciadas: “Desde el fondo de mi corazón estoy agradecida por ser parte de la solución. Que Dios bendiga a todos los integrantes del Tea Party y a América”.
Durante toda la campaña de McCain, Palin se convirtió en una mofa.
El 4 de noviembre de 2008, el demócrata Barack Obama venció a McCain, y en el aire flotaron partículas de alivio al saber que Palin no sería vicepresidenta.
La respuesta al porqué ella no parecía tener una idea de lo que hacía, la dio parcialmente la película Game Change (2012) de HBO dirigida por Jay Roach, la cual muestra en una escena crucial al equipo de campaña de McCain preocupado por la imagen que mostraba la candidata a la Vicepresidencia.
A pocos días del debate vicepresidencial entre Palin y el candidato demócrata Joe Biden, Sarah Palin, interpretada por Juliane Moore, está tomando notas mientras sus asesores desesperadamente tratan de enseñarle todo sobre historia, economía y política exterior.
Al estratega de campaña de McCain, Steve Schmidt, interpretado por Woody Harrelson, se le ocurre una idea.
“Todo lo que necesitamos es dejar que la mejor actriz en la política estadounidense (Palin) memorice 45 minutos de respuestas valiosas, entonces, ¿por qué perder cinco días tratando de que ella entienda lo que esto significa?”
Horas después, Schmidt se le acerca a Palin y le pregunta si pueda memorizar 25 respuestas y cuatro líneas de ataque. Ella respondió que sí.
A Sarah también se le recuerda por la respuesta que dio cuando el periodista Charles Gibson, de ABC News, le preguntó sobre las relaciones de EE.UU. con Rusia: “Son nuestros vecinos de al lado. Y de hecho se puede ver Rusia desde aquí, desde Alaska”.
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En el 2008 el programa Saturday Night Live, puso a su primera mujer guionista, Tina Fey en un podio para hacer una parodia de Sarah Palin. De todas formas el material para los sketches ya estaba casi escrito.
Las respuestas que daba la Miss Simpatía se convirtieron en guiones levemente alterados. En el libro Bossypants de Tina Fey, la comediante cuenta que al interpretar a Palin se sintió por primera vez como si el público de verdad quería verla.
El pasado martes 19, mientras Palin subía de nuevo a un escenario durante un acto de campaña en Iowa para apoyar a la candidatura de Donald Trump, su hijo mayor, Track, veterano de guerra, era arrestado por violencia familiar en el cual su novia temió que él se hubiera disparado.
“¿Están listos para un comandante en jefe que va a dejar que nuestros soldados hagan su trabajo y le den una patada en el culo al Estado Islámico?”, preguntó efusivamente.
Al lo que muchos respondieron con aplausos y gritos.
El impacto que pueda tener la intervención de Palin en la campaña de Trump es incierto, pero en Iowa es muy popular entre los grupos evangélicos dominantes. El acercamiento entre ambos es considerado por los analistas como un intento del magnate inmobiliario por superar a su mayor rival dentro del partido, el senador Ted Cruz.
Lo que sí debo agradecerle a Palin es que su discurso resucitó la parodia de Tina Fey. Fiel a su estilo, la clave, como hace ocho años, estuvo en repetir casi literalmente el discurso de Palin, y así nos recordó lo absurdo que es, en este mundo, casi todo.
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En el colegio la llamaban “Sarah Barracuda” por su forma de jugar basketball. Los barracudas son peces que alcanzan grandes velocidades en distancias cortas, son hostiles con los humanos, cazan en solitario y su presa favorita son los peces “pato”, una especie que sirve de base alimentaria, simplemente para que la barracuda pueda sobrevivir.