UCR tuvo un día lleno de música

Los estudiantes y visitantes de la Universidad de Costa Rica (UCR) vivieron ayer una intensa jornada en el cierre de la Semana U.

Desde temprano, cientos de jóvenes se aproximaron al parqueo de la Facultad de Educación de esa institución para disfrutar de nueve horas de música de artistas nacionales y un invitado extranjero.

Con sus bultos, cuadernos y tareas a cuestas, los estudiantes dejaron a un lado ayer su rutina diaria por unas horas para celebrar.

El rock fue el gran protagonista de la jornada, así como la música fusión y canción de autor.

Además de celebrar el cierre de la Semana U, los conciertos de ayer sirvieron para festejar el aniversario número 26 del espacio televisivo Música X Inclusión (MXI), que se transmite de lunes a viernes, a las 5 p. m. por canal 15.

El concierto comenzó a la 1 p. m. con la actuación del cantante Mechas, exintegrante de Kadeho, quien fue el encargado de darle la bienvenida a un público que aún no llenaba el lugar.

Su carta de presentación fueron los temas de su propuesta como solista así como los de su anterior agrupación.

Una hora después le llegó el turno al grupo Dogandul, los cuales lograron que los menos tímidos se pusieran a bailar al ritmo de las canciones de su disco Cae la noche, así como de un tema nuevo llamado Silencio, que causó buena impresión entre los que estaban en las primeras filas.

Con su fusión de ritmos latinos, el grupo le sacó jugo a la tarde en los 45 minutos que duró su show.

El rock tomó el centro del escenario de la mano del grupo 424, el cual, pese a no haber cumplido aún el año de su formación, demostró que la tarima no le quedó grande.

Temas como su sencillo debut, No quiero hablar, L´Archeologo y el coverCiclos, de Gandhi, fueron de los más aplaudidos de su repertorio, pero fue con Mapas y caminos con la que pusieron a cantar a los presentes y con la que cerraron su actuación. El público les pidió otra, pero el show debía continuar porque aún faltaban más grupos de compartir su música.

En las lomas cercanas al área de conciertos algunos aprovechaban para leer algunos de sus apuntes, jugar con una bola y hasta sirvieron para que algunas parejas se dieran unos apasionados besos.

De regreso a la música, toda la experiencia del grupo El Parque se hizo sentir con temas como Laura, En ese instante, Cuantas noches y Estaré muy bien, entre otros. Los asistentes los recompensaron con sus aplausos y esta vez sí los complacieron cuando se les pidió un tema más, ya que el siguiente grupo en el cartel venía atrasado.

La lluvia hizo su primera aparición de forma ligera pero unos minutos después desapareció.

La locura se apoderó del lugar gracias al sabor que Lucho Calavera y su grupo La Canalla le imprimieron a la jornada.

Con toda su energía, el grupo consiguió que la gente bailara al ritmo de temas como Amor bendito, Pa follar y Mi arte, entre otros.

“Disculpen cualquier problema con el sonido, pero es que aquí todo lo tocamos en vivo, no como Shakira”, dijo Lucho, tras su primera canción, causando risas y aplausos entre los presentes.

A las 6:20 p. m., le llegó el turno a Akasha mientras la lluvia caía con mas intensidad, obligando a unos a buscar refugio y a otros a empaparse con el rock de la banda. Muchas cabezas se sacudieron al ritmo de temas como Palacio de cristal, Descriptar y Alunizar.

Tras varios ajustes con el sonido que causaron inquietud en los más impacientes, a las 7:30 p. m., la banda Gandhi hizo su aparición en el escenario, con un llamado contra la violencia doméstica y con el tema Señor Caballero, en medio de fuertes aplausos y gritos.

La lluvia no dejaba de caer y, por supuesto, los vendedores de capas se hicieron presentes y salvaron a más de uno de la mojada.

Cuando sonaron temas como Ondularte y Arigato, a la gente se le olvidaba la lluvia y hasta los paraguas se mecían al ritmo de la música de la agrupación. Pero fue con El invisible que público y banda llegaron al éxtasis.

“Un saludo a todos los políticos que se empecinan en que estemos en conflicto”, fue el saludo que dio el cantautor nicaraguense Perrozompopo al empezar su presentación, y que provocó aplausos antes de entregar temas como La Tula Cuecho y Fantasma camaleón.

Al cierre de esta edición faltaba el último grupo de la jornada. El escogido fue Sonámbulo que prometía, como es ya su costumbre, poner en trance a la gente, con su ritmo psicotropical.

A repetir. Según explicó Irene Paniagua, coproductora de MXI, la intención es volver a montar actividades de este tipo en el futuro cercano y, tras el éxito de ayer, aseguró que es algo muy probable.

“MXI lo que representa es música, así que qué mejor manera de celebrar que con bandas que les gusta a la gente”, aseguró Paniagua.

Según la productora, la respuesta de las bandas fue vital, ya que algunos músicos hasta tuvieron que sacar el día libre para poder tocar ayer, en la UCR. También agradeció el apoyo de la Federación de Estudiantes (Feucr).

La producción del programa MXI está a cargo de un grupo integrado por unos 25 estudiantes de varias universidades.

Así fue también como el campus universitario recibió ayer a gente de todos lados. Según Mariano Salas, presidente de la Feucr, en el área del concierto de ayer había unas 10.000 personas.