Un día después de la insólita partida del cantautor argentino Facundo Cabral, sus colegas resaltaron ayer su grandeza.
El primero fue el cubano Silvio Rodríguez, quien utilizó su blog , Segunda cita, para recordar al argentino, asesinado el sábado en una emboscada en Guatemala.
Rodríguez incluyó la letra de la canción
“Facundo Cabral. Todas las cosas bellas comenzaron cantando, no olvides que tu madre cantando te acunó”, escribió Rodríguez, siendo hasta ahora la única personalidad pública cubana que ha reaccionado ante la muerte del argentino, según la agencia EFE.
Mientras tanto, ayer en Nicaragua se organizó un concierto en el Teatro Nacional Rubén Darío, sitio donde Facundo Cabral se presentó en ese país la semana anterior.
El concierto estuvo encabezado por los hermanos Mejía Godoy, Carlos y Luis Enrique, y fue organizado por organizado por el Instituto Nicaraguense de Cultura (INC).
El director de ese Teatro Nacional, Ramón Rodríguez, le dijo a EFE que ese concierto pretendía rendir un homenaje a Cabral, quien ocho días antes se habría presentado en ese mismo lugar.
En el homenaje también participaron la cantautora nicaraguense Norma Helena Gadea, Katia Cardenal, Luis Pastor González, Cristhián Somarriba, Luis Manuel Poveda y Ofilio Picón.
De forma adicional, el cantautor Luis Enrique Mejía Godoy reveló sus planes de solicitar un minuto de silencio en honor del intérprete de
Los mensajes de respeto también llegaron de campos ajenos a la música. Por ejemplo, Roberto Gómez Bolaños, el recordado Chespirito y el Chavo del 8, recurrió a Twitter para compartir su dolor.
“Facundo Cabral es ahora del más allá y del más acá, porque está en nuestros corazones. Te extrañaremos siempre, Facundo”, escribió el comediante de 82 años.
En la ciudad guatemalteca de Quetzaltenango, un grupo de músicos locales se reunió para cantar temas de Cabral, según el diario chapín
Dos días antes cantó en la capital guatemalteca, donde según recoge la prensa argentina, dijo como despedida: “Ya le di las gracias a ustedes. Las daré en Quetzaltenango, y después que sea lo que Dios quiera, porque él sabe lo que hace”.