Atrás quedó la exploración musical. Esta nueva encarnación de Korn es de todo, menos nueva. Su inspiración, esta vez, es su propia historia.
Quizás fue el desdén con el que muchos de sus seguidores acogieron su último material, lo cierto es que la banda californiana reclutó de nuevo al productor de sus primeros dos discos, Ross Robinson, para rescatar su sonido.
El resultado es
La mano de Robinson fue fundamental en el proceso. Por un lado, el productor los conocía desde los tiempos en que no eran nadie, solo una banda en busca de éxito; pasaban hambre y vivían el día a día.
El productor trató de recrear esos días en el estudio, en donde no se permitió a nadie ajeno al grupo, solo los cuatro músicos y Robinson estaban presentes en el cuarto de grabación con una misión: el renacimiento de Korn.
Además, lograron olvidarse de las presiones de las grandes casas discográficas. Esta es su primera producción para el sello independiente Roadrunner.
Lejos de preocuparse de cuándo debería salir el primer sencillo o qué pensaría el representante, se concentraron en hacer el disco que querían hacer y... punto.
Los primeros frutos ya empiezan a caer en el cesto de la gloria de la banda, liderada por el cantante Jonathan Davis.
El grupo lo completan el guitarrista James
Este nuevo material de la banda ha recibido, en su mayoría, elogios de la prensa especializada, que alaba el regreso a una propuesta más cruda de Korn.
Por si fuera poco, el disco debutó, esta semana, en el segundo puesto de los 200 álbumes más vendidos de la semana, según el reporte de la revista
Asimismo, la producción de Korn se colocó al tope de las listas de
Según la revista, con
Lo que una vez había sido una novedosa combinación del
Ya desde el 2005, Korn había empezado a trabajar con el equipo de productores llamado The Matrix, más conocido por crear el concepto de discos como el álbum debut de la canadiense Avril Lavigne, entre otros. Fue así como el sonido de Korn empezó a escucharse recargado. Mucho adorno.
Aunque sencillos como
“Con nuestro disco anterior chocamos contra la pared en términos de experimentación”, le dijo el cantante a la revista
Para encarrilarse en el sendero que la banda se había fijado en sus inicios, el grupo decidió deshacerse de toda la tecnología que había incorporado en sus últimas producciones discográficas.
“Nos desnudamos de toda la porquería. Este es solo un disco simple de Korn, con batería, bajo, guitarra y yo. Fue como una bocanada de aire fresco”, dijo Davis.
De igual forma, prometió que los próximos álbumes de Korn se harán solo de esta manera, ya sea con Ross Robinson o alguien más, pero nada de ornamentos.
No obstante, Davis ha asegurado ante la prensa de su país que tampoco desprecia el material producido por el grupo durante su época de experimentación, el cual afirma que le encanta y es grandioso.
Al dejar de lado toda la tecnología que se había incorporado al sonido de Korn, Davis cree que se logró un álbum más honesto y sobre todo más satisfactorio, según le dijo al sitio AZ Central.
En este mismo sentido, el vocalista agregó que cuando depositaron el peso del sonido del grupo en la tecnología se volvieron más perezosos, por lo que este nuevo trabajo representó un gran reto para la banda.
“Yo llegaba con algunas letras y las revisábamos línea por línea y hablábamos de todo lo que había detrás de ellas... Cuando empezaba a cantarlas, él (Robinson) utilizaba todas esas cosas en mi contra, era como echarle sal a la herida. Se metía en mi cabeza y me llevaba a un lugar muy malo. Caí en depresión, muy duro”, dijo el cantante.
“Hasta mi psiquiatra estaba molesto y quería llamarlo a él para preguntarle qué le estaba haciendo a este pobre chico”, recordó Davis.
Tan intenso fue el proceso de grabación que una vez concluido, el músico dejó de hablarle al productor por un buen tiempo.
“Luego lo llamé para agradecerle. Él hizo lo que tenía que hacer para que el disco saliera en la forma correcta. Yo sabía que era necesario, pero fue un infierno”, agregó.
Como resultado, el álbum ha sido descrito como “puro dolor”, ya que desnuda mucho de los demonios que Davis tuvo que enfrentar desde pequeño, como abuso infantil por parte de su padre.
Una muestra de esto es el primer sencillo del álbum, llamado
La canción viene acompañada por un video, donde se muestra a un niño pobre, mendingando en las calles, mientras la banda toca en medio de un callejón frente a una casa quemada.
La canción alcanzó el
Si la calidad del grupo estaba en entredicho, esa herida parece ahora que ha empezado a sanar.