San José Redacción. Un año ha pasado desde que murió el cantante Fidel Gamboa pero su voz sigue presente entre los costarricenses gracias a su legado con el grupo Malpaís.
El domingo 28 de agosto del 2011 el país lloró la partida de uno de sus músicos más queridos, víctima de un infarto múltiple, a sus 50 años.
Solo la noche anterior, Gamboa había estado en el escenario del antiguo Club 212 donde compartieron el escenario con la agrupación guatemalteca Alux Nahual.
Esa noche, como era usual, el músico brilló en el escenario junto a sus compañeros.
“El cantante Fidel Gamboa hizo alarde de su talento al interpretar El barrio de los jazmines , en un verdadero trabalenguas que dejó atrás la intención del público de seguirle los pasos a la letra”, retrata la crónica de Viva publicada tras el concierto y antes de que trascendiera la noticia de su deceso.
El asombro y la tristeza se apoderaron del país ese domingo, cuando en la tarde se confirmó el fallecimiento de Fidel Gamboa.
Su muerte fue calificada como una gran pérdida para la música nacional por los usuarios del sitio de La Nación y en las redes sociales.
Miles de personas llegaron a despedirse de su cuerpo, porque su voz sigue aquí, en la vela que se organizó en el Centro Nacional de la Cultura (Cenac).
Nacido en Nicoya y con claras tendencias artísticas desde muy pequeño; Gamboa dedicó los últimos 11 años de su vida a Malpaís, el grupo que formó Jaime Gamboa (bajo y coros), Iván Rodríguez (violín, mandolina y coros), Manuel Obregón (piano, teclados, marimba, caracol y coros), Carlos "Tapao" Vargas (batería y percusión), Gilberto Jarquín (batería) y Daniela Rodríguez (voz y coros).
Su música se caracterizó por ser una rica fusión de géneros que van desde el jazz , al rock y el folclor, entre otros.