Mejor público no pudo encontrarse en su tercera visita a Costa Rica, la cantante mexicana Aída Cuevas, reconocida voz internacional escogida para cerrar con broche de oro el Festival Ranchero, que se realizó anoche en el redondel de toros en Palmares.
A partir de las 9:25 p. m., el público la coreó, le aplaudió de pie y le agradeció su entrega y sus interpretaciones. La mexicana estaba feliz y le dijo a la gente que los ticos sabían mucho de mariachis.
“Para mí es un honor estar en un país como Costa Rica. Al estar tan lleno de tanta belleza natural, sin lugar a dudas, lo mejor es su gente. Gracias a la invitación a este festival, que es el más importante de este país”, expresó Cuevas en su primera intervención de la noche.
Al cierre de la edición, la mexicana interpretaba el tema La noche acompañada por un coro gigante.
Y volver, volver. El hijo pródigo siempre regresa a casa y el Festival Ranchero de Palmares 2014 es una muestra de ello, pues los organizadores de la actividad decidieron regresar por todo lo alto a su tradicional escenario: el redondel de toros de la comunidad –el año pasado, fue en la zona de conciertos–.
Como era de esperarse, el público fiel de este esperado espectáculo musical agradeció la iniciativa de la Asociación Cívica Palmareña y llenó casi en su totalidad el redondel, que tiene una capacidad para 2.000 personas. Esto era tan solo el preámbulo del concierto: el público estuvo seguro de que sería una noche para no olvidar.
Al ser las 7:30 p. m., el Mariachi Ramonense se apoderó de la tarima, para ir calentando los ánimos de los asistentes. Los músicos no pudieron encontrar mejores cómplices que los conductores de la gala: el presentador de Buen Día, Édgar Silva, y el locutor de Q' Teja, Andrés Zamora, mejor conocido como Padre Mix.
La edición número 22 del festival también retomó otra de sus más importantes tradiciones, el esperado concurso ranchero. En esta oportunidad, la competencia tuvo 11 participantes de todo el país.
“Para nosotros, es un honor que los organizadores hayan decidido retomar el concurso. Como cantantes, consideramos que este es el festival ranchero más importante porque es una vitrina a la que todo el país dirige su mirada”, expresó Johnny Araya Mesén, oriundo de Naranjo, y quien participó por segunda ocasión en esta actividad.
Si bien es cierto el público agradeció la entrega y el talento de cada uno de los participantes, el gran ganador de la noche y de los ¢400.000 fue Henry Jiménez. Por segunda ocasión, él se destacó por su afinación, voz e interpretación, algunos de los aspectos que evaluó el jurado, integrado por los músicos y compositores Johnny Víquez, Javier Méndez y Carlos Cordero.
Se hizo común a lo largo del espectáculo, que busca convertirse en una actividad para toda la familia, ver a niños, jóvenes y adultos corear a todo pulmón temas como A mi manera , Perfume de gardenias , México lindo y querido , y Voy a navegar , entre otros.
Fue evidente que, para ellos, aquella noche significó volver a ese “hogar” que rinde tributo al género ranchero.