“¿Les cuento un chiste? Si no quieren, no lo digo, pero ¡necesito una pausa para reponerme de la tesitura de estas canciones!”.
Con intermedios así, el cantautor español Braulio retomó el aliento tras cada tema que cantó anoche, en el espectáculo
Reenamorando a más de una –y uno– con sus canciones, el artista hizo un repaso por algunos de los éxitos de su larga trayectoria.
A las 8:25 p. m., poco después de la hora prevista, subió al escenario el joven talento costarricense Allan López, quien abrió la velada con el popular tema
No acababa de bajar cuando fue el turno de los ticos del grupo MasterKey, quienes deleitaron con un coro
Y dieron las nueve cuando el público empezó a llenar la sala; según informó Juan José Rojas, vocero de la productora Tropix II, el espectáculo se cerró con un total de 700 entradas. Ese mismo público aplaudió repetidamente hasta que a las 9:20 p. m. apareció Braulio.
“Estoy un poco descontento porque este es un concierto donde se supone que el público debe participar... así que ¡vamos a ver si en esta sí me ayudan a cantar!”, replicó.
Inició :
Con esa misma soltura, intercaló las canciones
De repente bajó el tono jocoso, y pidió a algunas mujeres “en evidente estado de gravidez” que subieran al escenario para dedicarles
Tras un destello de improvisación, el cantante recordó cuánto le disgusta que tomen sus canciones y las conviertan a ritmos tropicales, así que a modo de “venganza” interpretó
Robando más aplausos, cantó
Listo para retirarse, el artista anunció la que probablemente fuera “su canción más romántica”...
–Ya me voy...
– ¡Noo!– gritaba la gente.
–¡Pero tengan compasión!–, replicó el cansado Braulio, quien sin embargo no se hizo rogar más para volver y cantar
Entonces hizo cuatro reverencias, agradeciendo a ese público entusiasta, y culminó con